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Belén Fernández niega indisciplina de voto y reafirma su apoyo a Ramón

La vicepresidenta del Consejo justifica su abstención en la votación del Plan de Pequeñas Obras en una «cuestión técnica» al desconocer parte del expediente

Belén Fernández, el jueves con Francisco Fernández, Ibán García y Aníbal Merayo (atrás).

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M. C. Canedo / C. Fidalgo | ponferrada
Ponferrada

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La vicepresidenta del Consejo del Bierzo, Belén Fernández, ha negado que su abstención durante la aprobación del Plan de Pequeñas Obras por parte del último Consejo de Gobierno de la institución comarcal suponga un caso de indisciplina de voto. Fernández atribuye su voto al margen del grupo socialista en «una cuestión técnica» y reafirmó su apoyo incondicional al presidente del Consejo, José Luis Ramón.

La vicepresidenta comarcal, también alcaldesa de Cabañas Raras, insistió en que su voto diferenciado del grupo socialista en el último Consejo de Gobierno «no ha supuesto en absoluto ningún problema entre él (José Luis Ramón) y yo, ni se escenifica como tal». La vicepresidenta comarcal justificó su abstención en «una cuestión técnica» sobre el reparto de los fondos. «Había partes en cuestión que yo desconocía y como me incorporé un poco tarde a la reunión, pensé que era más conveniente no votar en esa dirección», manifestó el pasado jueves, poco antes de asistir a la reunión con secretarios de las agrupaciones locales del PSOE en el Bierzo para recibir el borrador de estatutos de la futura agrupación comarcal.

Fernández ofrecía así las explicaciones que públicamente le había demandado el propio José Luis Ramón, que «en principio y por sentido común», interpretaba que la abstención de su vicepresidenta obedecía a un desacuerdo con el reparto.

Fernández volvió a recibir el apoyo de la Ejecutiva provincial del PSOE, de la que es vicesecretaria general. El secretario de Organización, Ibán García, que ya había justificado a Fernández, reiteró que considera la abstención de Belén Fernández «una anécdota» y estableció una diferencia entre la situación creada en torno a la vicepresidenta comarcal y los consejeros que a comienzos del mandato de Ramón fueron expedientados por no respaldar al presidente del Consejo en un pleno comarcal. «No es lo mismo un órgano deliberativo y de trabajo como un Consejo de Gobierno, que un órgano representativo como puede ser un pleno municipal», afirmó.

García entiende que las reuniones de un Consejo de Gobierno son «un foro interno» donde puede exponerse ideas para su debate.

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