Reportaje | m. á. cebrones
La ermita del pueblo
Tremor de Arriba reabre el templo dedicado a San Esteban, que data de 1832 y ha sido restaurado por los vecinos
Los vecinos llenaron ayer la ermita, con el retrablo al fondo.
Fue en 1832 cuando por primera vez San Esteban, patrón de Tremor de Arriba (Igüeña), contó con una ermita gracias a la voluntad popular, con la cesión de terrenos particulares y el esfuerzo y trabajo del resto de los vecinos. Pasado el tiempo, el recinto fue deteriorándose hasta caer en desuso por el riesgo que suponía adentrarse en el tiempo. Exactamente 122 años después, cumplidos en la festividad de San Esteban, han sido nuevamente los vecinos los impulsores de la recuperación de la vieja ermita.
Con el impulso de la Junta Vecinal y la Asociación cultural Virgen de Peñafurada, la restauración de la ermita ha contado, según Víctor Castro, alcalde pedáneo, con una ayuda especial; «la unidad de todos los vecinos en los trabajos de restauración, algo difícil de conseguir normalmente y que en este caso es lo mas destacable de todo». Asegurar los muros de piedra, renovar la techumbre, fijar el enlosado, renovar las vidrieras de los ventanales y restaurar la bancada son parte de las actuaciones llevadas a cabo por los vecinos de Tremor de Arriba en la labor de restauración en la que destacan la recuperación del retablo, para la que se han usado buena parte de las piezas originales.
Antonio González Castillo fue el encargado de la restauración del retablo, una labor difícil a causa del deterioro paro que González calificó como «un trabajo emocionante. Que todo un pueblo ponga en tus manos una pieza de estas características es un orgullo. No puedes pedir mas». González se ha encargado así mismo de la restauración de las imágenes de San Esteban y Santa Bárbara, «las originales de Tremor de Arriba».
Durante la jornada anterior a la inauguración, los vecinos se afanaron en la eliminación de nieve y hielo que impedían el acceso hasta la ermita consiguiendo así una participación masiva de público en la recuperación de la ermita de San Esteban como escenario de los actos religiosos en honor del patrón del pueblo. Los últimos años se celebraran en el exterior o en el edificio de usos múltiples.
En la fiesta inaugural que siguió a los actos religiosos ya se apuntaba la voluntad de celebrar en la ermita, «joya del patrimonio de Tremor», las tres bodas inicialmente programadas para 2010 en la población.
La jornada festiva se completó con una multitudinaria pulpada y un baile vermut acompañado de charanga. Desde la Asociación Virgen de Peñafurada y la Junta Vecinal de Tremor de Arriba ya se estudian nuevas recuperaciones de patrimonio para sumar a la ermita de San Esteban, al molino de agua, la elaboración del pan de centeno o las cabañas pastoriles.