El PP pasa página para intentar recomponer su relación con Vox

Y ahora qué. El Partido Popular optó este miércoles por rebajar la tensión con Vox, después de que los dos concejales de la formación de Santiago Abascal adelantasen que Marco Morala había cedido en su pretensión de crear delegaciones de Cultura y Formación y Empleo ante la imposibilidad legal de crear los dos institutos prometidos a cambio de dar la Alcaldía al PP el pasado verano. Un acuerdo que estuvo firmado pero que Morala revocó a última hora del pasado lunes, junto con el aplazamiento del pleno de Presupuestos para una nueva fecha aún por fijar.

En esa línea de rebajar la tensión estuvo ayer el alcalde, que no hizo valoraciones públicas, y el concejal de Hacienda, Luis Antonio Moreno, con unas declaraciones distribuidas por el Gabinete de Prensa del Ayuntamiento de Ponferrada, donde reiteró que estudiarán las enmiendas de Vox, pero que necesitan tiempo ya que se presentaron el pasado lunes.

Sin embargo, ese tono contrasta con el camino emprendido por Vox. Los dos concejales en el Ayuntamiento de Ponferrada, Patricia González y Gerardo González, anunciaron este miércoles que «renuncian a sus cargos y sueldos ante la traición del pacto firmado» con el alcalde, Marco Morala. Los ediles remitieron una nota de prensa para asegurar que «no han tenido más alternativa que registrar su renuncia tanto a las competencias que tenían como a los sueldos que venían recibiendo», después de que en la tarde-noche del martes Morala optara por aplazar la sesión plenaria convocada para aprobar este miércoles el presupuesto municipal. Morala justificó el aplazamiento para estudiar las enmiendas al presupuesto planteadas por Vox, pero la formación considera que ya estaban pactadas desde el domingo, incluida su entrada en el equipo de gobierno.

«Los acontecimientos de estos últimos días nos causan profundo desasosiego, una enorme desconfianza entre ambos socios del equipo de gobierno y una sensación de desconcierto profunda: para Vox la política debería ejercerse desde la responsabilidad, empezando por cumplir los acuerdos pactados y firmados y no desdecirse de ellos al cabo de unas pocas horas», argumentan los ediles en la nota.

Vox entiende que, o bien el alcalde, o bien Coalición por Bierzo, «mienten» y consideran que todo obedece a «un gesto a la desesperada por parte del portavoz de CB ante el previsible aluvión de críticas». Entiende Vox que ser trata de un «gesto con el que (Iván Alonso) trata de desmarcarse de un pacto en el que no participa de forma oficial, pero con el que deja al alcalde a los pies de los caballos». Por eso pide a los dos socios del equipo de gobierno que «se aclaren y aclaren a los ponferradinos quién de ellos miente».

Vox asegura también que «sigue con la mano tendida», y esa esa frase la que abre la posibilidad de un nuevo acuerdo para recomponer la situación que, en cualquier caso, pasa porque Vox no entre en el equipo de gobierno, sino que asuma responsabilidades a través de otra fórmula, como iban a ser los institutos como el que fue un día el Imfe, extinguido en la etapa de Olegario Ramón como alcalde.

«Nos hubieran gustado que las circunstancias fueran otras, que se hubieran presentado las enmiendas en plazo. Queremos transparencia y no pasa nada. Irán a pleno», señaló ayer Moreno. Sobre el acuerdo para llevar esas áreas de Cultura y Formación y Empleo a través de delegaciones especiales, el concejal señaló que, al desconvocar el pleno, se han revocado los acuerdos. De todas formas, sigue abierta la búsqueda de nuevas fórmulas como los institutos.