Toque de atención

Las Cortes aprobaron el pasado miércoles con el consenso de los tres grupos de la Cámara, Popular, Socialista y Mixto, una propuesta en la que «pone deberes» a la Junta de Castilla y León para la elaboración de un plan de atención específico para personas con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), destinado a que haya un diagnóstico y un tratamiento para corregir esas conductas.

La -˜popular-™ María Canto Benito elogió el acuerdo de todos los grupos y se dirigió a los padres y miembros de algunas asociaciones que seguían el debate en la tribuna de invitados para manifestarles que la iniciativa que se aprobaba tenía su firma y, a partir de ahora, tendrán que trabajar con la Junta. «Un niño con hiperactividad no es menos inteligente», afirmó. «Espero tener el plan dentro de poco», aseveró.

Por su parte, la socialista María Luz Martínez Seijoo, que también felicitó a las asociaciones presentes, destacó los pasos que se dan para la atención de un 7% de los niños que tienen este trastorno en Castilla y León y subrayó la importancia para su corrección de que exista un diagnóstico adecuado. Martínez Seijoo se refirió al caso de un alumno de Ponferrada al que no se le diagnóstico este síndrome hasta cuarto de primaria y, hasta ese momento, estuvo solo en las aulas. «Esto no debe producirse jamás», afirmó.

También el portavoz del Grupo Mixto, Joaquín Otero, dedicó de forma breve unas palabras de bienvenida a las asociaciones «que han empujado y tirado del carro» al presentar una propuesta que «llegaba casi cocinada» para que la propuesta se apruebe con matices realizados por los grupos. «Las iniciativas que se presentan por unanimidad son una garantía de éxito y nos olvidamos del debate político para hablar de las cuestiones médicas o educativas, eso es muy bueno», sentenció. Otero subrayó que la propuesta «pone deberes a todos» a la Junta, a las universidades, a los profesores y a las familias, y animó a las asociaciones a que «presionen en el buen sentido», animó el leonés.

La propuesta, firmada los tres portavoces parlamentarios, Carlos Fernández Carriedo (PP), Ana Redondo (PSOE) y Joaquín Otero (Grupo Mixto), implica a las consejerías de Sanidad, Educación y Familia, a los centros educativos, a las universidades y al Ministerio de Sanidad. «El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad se inicia en la infancia y en un porcentaje bastante importante permanece en la edad adulta», describe la iniciativa consensuada por los tres grupos de la Cámara.

La primera medida se dirige a las consejerías de Educación, Sanidad y Familia. Así, se creará un Grupo de Trabajo Multidisciplinar entre los tres departamentos citados, dado que el tratamiento está descrito en el campo de la medicina y de la psicopedagogía, pero su aplicación real en el aula y en la sociedad requiere medidas de la sanidad, educación y familia.