Diario de León

La Junta impulsa un impuesto de medio ambiente que no paguen los ciudadanos

La iniciativa se debatió ayer con otras ocho comunidades autónomas del país

Pilar del Olmo, en una imagen de archivo.

Pilar del Olmo, en una imagen de archivo.

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saray maestro | valladolid
León

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Un paso más en la creación del tributo medioambiental. La Junta de Castilla y León se ha propuesto crear por primera vez un impuesto propio a las eléctricas sobre la producción hidroeléctrica y el transporte de energía de alta tensión que se produce en la Comunidad. Tras la aprobación en las Cortes del grupo de trabajo el pasado 24 de noviembre y la reunión de dicho grupo, en el que participan todos los grupos parlamentarios, el pasado 18 de enero, ayer se continuó con las medidas pactadas y se celebró una jornada de trabajo con ocho Comunidades Autónomas con el objetivo de conocer la experiencia de otros lugares donde ya se ha establecido tributos parecidos. «Tras estas jornadas podremos presentar un anteproyecto de ley que requerirá un informe del Consejo Consultivo y del Consejo Económico Social pero que esperamos que esté listo antes de finalizar la legislatura», aseguró Pilar del Olmo, consejera de Hacienda, que informó que están a la espera de la contestación de la Comisión Nacional de la Energía. «Vamos a adaptar el impuesto de otras Comunidades al nuestro, ya que el potencial de agua embalsada y el de la energía eléctrica de nuestros embalses no tiene nada que ver con la Comunidad Gallega por ejemplo», señaló. Sin embargo, destacó que deben ir paso a paso ya que no quieren que suceda lo mismo que en Extremadura «donde tienen pendiente de resolver un recurso con las eléctricas y el anterior impuesto fue declarado inconstitucional con lo que deben devolver las cantidades recaudadas y eso sería una dificultad añadida a unos momentos de crisis».

Otro de los objetivos es determinar el tipo de gravamen, «es decisivo para ver cuánto es la recaudación, no queremos que sean impuestos confiscatorios pero tampoco que supongan una recaudación ridícula» y recordó de nuevo que en ningún caso la Junta está dispuesta a gravar un impuesto si más tarde puede repercutir a los contribuyentes. La consejera avanzó que hay tres Comunidades que ya están cobrando este impuesto: Galicia un canon hidroeléctrico y el Principado de Asturias y Extremadura el transporte de energía de alta tensión.

Sonia Lafont, directora de Tributos Propios de la Xunta de Galicia, señaló que en su Comunidad existen cuatro impuestos medioambientales establecidos en el ámbito de la contaminación atmosférica, dos en las aguas y el canon eólico, que apenas lleva un año en funcionamiento. «La experiencia con respecto al resto que llevan tres años ha sido positiva, funcionan como tributos extra fiscales y regulan la contaminación atmosférica», señaló Lafont. A su vez añadió que de momento las eléctricas no han presentado problemas al canon, que las presentaciones son a través de autoliquidaciones, y que al año tienen una estimación de doce millones de recaudación.

Por su parte, Raquel Pereira, directora general de Finanzas del Principado de Asturias, anunció que en su Comunidad han puesto en marcha un tributo al transporte de la energía eléctrica y de las telecomunicaciones para este año 2011. «De momento no hemos tenido una manifestación negativa por parte de las eléctricas». En Asturias cuentan con 9.000 kilómetros de líneas eléctricas más los elementos externos de los postes de las telecomunicaciones y tienen estimada una recaudación de ocho millones de euros. «El impuesto tiene sus limitaciones ya que sólo gravamos la parte que está en territorio medioambiental, pero hay exenciones para todas aquellas partes de telecomunicaciones que sean públicas o aquellas que van relacionadas con la comunicación vía internet en el medio rural».

Primer impuesto. La jornada celebrada ayer también contó con la presencia de José María Utande San Juan, subdirector general de Relaciones Tributarias con las Haciendas Territoriales del Ministerio de Economía y Hacienda. Antes de la reunión comentó que «sería el primer impuesto en Castilla y León pero no en España, por lo que consideramos que entra dentro del marco de sus competencias». «La ley que fija el impuesto es la que debe establecer que no se repercuta a los ciudadanos o contribuyentes, aunque estará en la decisión de cada empresa el articularlo». Finalmente con respecto a una media de lo que Castilla y León podría llegar a recaudar dijo que «en momento de crisis cualquier recaudación viene bien, no es comparable a la que se obtiene por los grandes tributos pero es importante también para la Comunidad».

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