Condenadas tres monitoras por la muerte de un niño
La sentencia fija también un año de cárcel al coordinador del parque de ocio
Imagen del parque de Valladolid donde ocurrió el suceso.
El Juzgado de lo Penal número 2 de Valladolid ha condenado a tres monitoras y al coordinador del Parque de Aventuras Juan de Austria de Valladolid a un año de cárcel en cada caso por un delito de homicidio por imprudencia grave cometido cuando murió un niño de 2 años en la piscina del centro de ocio.
La sentencia absuelve a dos administradores de La Ballena Creativos de Animación S.L., empresa concesionaria del parque donde se desencadenó el suceso, y establece que los cuatro condenados indemnicen de forma solidaria a los padres del fallecido con 94.774 euros -”la mitad para cada progenitor-” y con 17.231 euros a la hermana del pequeño, según el fallo a la que ha tenido acceso Efe en fuentes del TSJCyL.
La resolución judicial, de 43 folios, fija que la responsabilidad civil directa corresponde a la compañía de seguros Mapfre y la subsidiaria a La Ballena Creativos de Animación S.L. y al Ayuntamiento de Valladolid, propietario del parque.
Los hechos por los que se celebró el juicio ocurrieron el 22 de julio de 2008, en el Parque de Aventuras Juan de Austria, al que acudió el niño de 2 años como parte de un grupo de 32 menores de un colegio que fueron a participar en una actividad de verano concertada previamente.
En el apartado de hechos probados, la resolución judicial explica que la piscina en la que ocurrieron los hechos era portátil, adquirida por decisión del coordinador del parque en junio de 2008, era de material de plástico, desmontable, con 4,5 metros de diámetro y 1,2 metros de altura y una profundidad de agua de un metro.
Analiza cómo el coordinador no contrató ningún socorrista para el cuidado de bañistas y sí comunicó al Ayuntamiento la instalación de la piscina, «sin que conste la autorización expresa». Aquel 22 de julio, el pequeño que después resultó muerto acudió al parque junto a otros 31 niños del colegio Corazonistas de Valladolid capital, para participar en una actividad programada, después de que una de las profesoras del centro educativo advirtiera al centro de ocio de que los niños más pequeños no entrasen en la piscina de las instalaciones.