Juzgan a dos islamistas de Burgos por enseñar a hacer bombas
Integran una célula salafista que incita a la «yihad» por Internet
Los presuntos terroristas islamistas Abdelkader Ayachine y Wissam Lotfi serán juzgados hoy en la Audiencia Nacional por integrar una célula salafista radicada en Burgos dedicada a incitar a la «yihad» y a facilitar información para la fabricación de bombas a través de Internet.
El fiscal de la Audiencia Nacional Daniel Campos reclama por estos hechos diez años de cárcel para Ayachine y ocho para su lugarteniente Lotfi por pertenencia a banda armada.
En su escrito de conclusiones provisionales, el fiscal relata que los dos acusados, detenidos en octubre de 2007, integraban una célula salafista denominada Al Ansar, extensión del Grupo Islámico Armado (GIA) Europa, que venía operando en Burgos desde 2000, bajo la cobertura de la carnicería musulmana Thiba.
La célula estaba liderada por el propietario de la carnicería, Bouchaib Magher, hasta su detención el 30 de diciembre de 2002 por su participación en los atentados de Casablanca, momento en el que Ayachine se hizo cargo del negocio y asumió el liderazgo de la célula junto a Lotfi.
De hecho, los dos recaudaron fondos entre la comunidad magrebí de Burgos, Madrid y Palencia para Magher en concepto de zacat (limosna), indicando que era para «un hermano preso por la causa de dios» y, de este modo, le enviaron fondos en diez ocasiones entre 2003 y 2007 con cantidades que oscilaron entre los 100 y 750 euros.
Ambos, añade el fiscal, eran seguidores de líderes de Al Qaeda como Osama Bin Laden y Abu Mussab Al Zarqaui, y cuando Ayachine supo del fallecimiento de este último en 2003 le dijo a Lotfi en conversación telefónica: «Qué Dios le premie por el trabajo realizado».
Bajo la inspiración de estos líderes, prosigue el escrito, los dos se dedicaban a adoctrinar a otras personas que se congregaban en la carnicería para que fueran a la yihad en Irak y Afganistán, y mantenían relaciones con otras células de Suecia y Dinamarca. A través de Internet, también incitaban a la yihad e intercambiaban información sobre la fabricación de explosivos.