La Comunidad roza la matrícula de honor en Ley de Dependencia
Sólo Castilla-La Mancha mejora los registros de la autonomía
Castilla y León es la segunda comunidad, después de Castilla-La Mancha y al mismo nivel que el País Vasco, que mejor aplica la Ley de la Dependencia, según el VII Dictamen del Observatorio de la Dependencia presentado hoy en Madrid por la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales. La Comunidad logra 9,5 puntos sobre diez, un sobresaliente, frente a una media general de 5,9 puntos.
El dictamen elaborado por los profesionales pone de manifiesto que Castilla-La Mancha, País Vasco, Castilla y León, La Rioja y Aragón obtienen un sobresaliente en la aplicación de la Ley de la Dependencia, mientras que Canarias, Comunidad Valenciana, Asturias, Baleares y Madrid suspenden y continúan «privando a sus ciudadanos de los derechos de esta ley», denuncian.
De hecho, la asociación critica que «se mantiene invariable el empecinamiento de cinco comunidades en no aplicar las prestaciones y servicios que contempla la ley», lo que pone a «sus ciudadanos en una situación de desprotección frente al resto en una materia de protección social básica». Estas comunidades son Canarias (0,5 puntos), Comunidad Valenciana (1,5 puntos), Asturias, Baleares y Madrid, con diferentes puntuaciones, además de Ceuta y Melilla (territorios Imserso), que suspenden en la aplicación de la escala.
Segunda caída seguida. En el resto destaca el descenso de alguna comunidad, como es el caso de Andalucía, que tras venir ocupando los primeros lugares del ranking, cae por segunda vez consecutiva a una puntuación de 7 puntos, o Asturias, que vuelve a bajar en este VII Dictamen suspendiendo por segunda vez en la aplicación de esta escala con tan sólo tres puntos.
Por el contrario, Extremadura y Murcia, comunidades que logran un aprobado raspado de cinco puntos, han realizado sendos esfuerzos por mejorar en la aplicación de la ley, reconocen los profesionales.
El Observatorio también presentó el libro Evolución de la Ley de Dependencia durante los últimos cuatro años , donde se evidencia que a nivel general continúa registrándose una mejora en la implantación de la ley en las distintas comunidades, pasando de una puntuación media de 4,97 puntos en enero 2010 a 5,44 en junio del mismo año, a 5,6 en enero de 2011 hasta los 5,9 puntos alcanzados en junio de 2011, de acuerdo a los datos recogidos por la Agencia Ical en una información.
Respecto a la situación global del sistema, al finalizar el cuarto año de aplicación de la Ley de la Dependencia, el Observatorio constata cuatro aspectos especialmente «preocupantes» porque son «crónicos» en su funcionamiento: el limbo de la dependencia, el modelo de financiación, el sobredimensionamiento de la prestación económica de cuidados en el entorno familiar y cuidadores no profesionales y la falta de transparencia informativa.