UPA y Coag reclaman mayor control de los animales salvajes

La Alianza por la Unidad del Campo de Ávila, que forman las organizaciones agrarias UPA y Coag, denunció ayer el incremento de casos positivos de enfermedades como la tuberculosis o brucelosis en la ganadería extensiva de la provincia ante la proliferación de animales salvajes.

Según informó la Alianza, la expansión de especies como ciervos, corzos, jabalíes e incluso lobos en determinadas zonas está poniendo en jaque a los ganaderos abulenses. Las organizaciones aseguran que en las campañas de saneamiento ganadero cada vez más animales dan positivo a enfermedades que tienen su origen en la fauna salvaje.

UPA y Coag han solicitado varias veces a la Junta de Castilla y León que adopte actuaciones de control con los animales salvajes, que cada vez en mayor número se están asentando en tierras abulenses. Los sindicatos alertan sobre un problema que se arrastra desde hace tiempo y que ahora representa un inconveniente aún mayor, si tenemos en cuenta la situación económica límite en la que se encuentran.

Sacrificios y lobos. La primera consecuencia de esta situación es que los ganaderos se ven obligados a sacrificar cabezas de ganado e incluso a realizar una vaciado sanitario, con los gastos que ello supone y que ahora mismo, declaran, es inasumible para cualquier productor abulense.

A esto habría que sumar el problema de los ataques de lobos que sigue sin resolverse y que se producen cada vez en zonas más cercanas a núcleos de población, e incluso ante la presencia de personas, advierten.