Diario de León

Masivo seguimiento del primer día de huelga de los enfermeros de Servicios Sociales

La jornada de huelga se convocó por el deterioro de las condiciones laborales que supone para este colectivo la aplicación del aumento de la jornada laboral

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ICAL

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Los profesionales de Enfermería de las residencias y centros de atención a disminuidos psíquicos (CAMP) de la Comunidad secundaron hoy de forma mayoritaria los paros parciales convocados por el sindicato de enfermería SATSE de Castilla y León «por el deterioro de las condiciones laborales que supone para este colectivo la aplicación del aumento de la jornada laboral establecido por la Junta de Castilla y León, discriminando claramente a estos profesionales frente al resto de empleados públicos regionales».

Los paros se han producido en el turno de mañana y están también convocados para el de tarde, así como para mañana 26 de abril y para el día 27 en las residencias y en los CAMP de Castilla y León que dependen de la Gerencia de Servicios Sociales de esta Comunidad. Además, durante la mañana de hoy se han producido sentadas y concentraciones de enfermeros en la entrada de estos centros asistenciales de las nueve provincias de Castilla y León.

Según el sindicato, la protesta fue secundada esta mañana por toda la plantilla de enfermeros de los centros de las provincias de Ávila, Zamora (incluido Benavente), Palencia, Salamanca y Segovia, y de la capital burgalesa, mientras que fue respaldada por el 75 por ciento de los enfermeros de Servicios Sociales de la provincia de León y por el 50 por ciento de los de Valladolid, Soria y Miranda de Ebro (Burgos).

SATSE ha convocado estos paros parciales porque a los empleados públicos de la Administración regional que trabajen de mañana y de tarde se les permite flexibilizar el cumplimiento de la jornada laboral de 37,5 horas semanales y esto no les supone ir a trabajar más días ni los sábados ni los domingos, mientras que a los enfermeros de Servicios Sociales, «que trabajan a turnos, hacen noches y trabajan en festivos (y cuya penosidad laboral ya es manifiesta), no sólo es que tengan que trabajar los sábados y domingos, sino que el aumento de jornada les va a suponer en algunos casos tener que trabajar hasta 11 días más al año». «Esto no sólo puede tener como consecuencia un problema de salud laboral para estos trabajadores por realizar tantos días de trabajo, sino también puede impedir gravemente la conciliación de la vida laboral y familiar, ya que se plantean calendarios laborales de 60 horas semanales con dos días de descanso en los que ya está incluida la salida de noches», indicaron.

El sindicato recuerda a la Gerencia de Servicios Sociales y a la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades que además, a día de hoy, la jornada laboral de muchos de ellos «incumple la Directiva Europea de Tiempos de Trabajo, de aplicación a todos los trabajadores y también explica que estos profesionales de enfermería son los que menos cobran de la Administración pública con mucha diferencia y es el personal en el que menos incidencias se cubren en Servicios Sociales». Además, SATSE ha aceptado los servicios mínimos establecidos por la Administración autonómica para estos paros, pero sin embargo, la Gerencia de Servicios Sociales «no ha presentado ninguna propuesta que reconduzca la situación hacia una solución a este conflicto laboral, como tampoco acepta las reivindicaciones de SATSE». En este sentido, el sindicato critica que ni el gerente de Servicios Sociales, Jesús Fuertes Zurita, ni la consejera de Familia, Milagros Marcos, se presenten a las reuniones de la Junta con los representantes de los trabajadores, lo que demuestra «lo poco que les importan ya no sólo las reivindicaciones de este colectivo enfermero, sino incluso el nulo valor que le dan a la trabajo que realiza en las residencias de mayores y en los CAMP».

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