La Junta limita las guardias de los MIR de la Comunidad a cuatro al mes
La provincia cuenta con 235 médicos residentes, la tercera con mayor número .
La Consejería de Sanidad limitará las guardias que realizan los médicos internos residentes a cuatro mensuales, el mínimo legal que fija el Ministerio para la formación de especialistas en Ciencias de Salud.
La decisión deriva de que los responsables de Sacyl han detectado que algunos residentes realizan hasta nueve guardias con los respectivos descansos obligatorios, libranzas que podrían poner en cuestión su programa formativo.
En concreto, la medida se ajusta a los programas formativos del Ministerio de Sanidad, que establece un mínimo de cuatro guardias y un máximo de seis para todas las especialidades, excepto para las de Medicina de Familia y Preventiva, donde la horquilla oscila entre tres y cinco.
Desde hace cuatro años, en Castilla y León los MIR podían realizan hasta seis guardias, a tenor de un pacto alcanzado entre Sacyl y la coalición Cesm-Satse en 2007.
Tras una guardia ordinaria, el MIR tiene que descansar al menos 12 horas, así como tras una jornada de 24 horas ininterrumpidas, bien sea de jornada ordinaria que se haya establecido excepcionalmente, bien por jornada complementaria o de tiempos conjuntos de ambas.
La excepción la marcan casos de especial interés formativo según criterio de su tutor o en casos de problemas organizativos insuperables.
«Hemos detectado que en algunos casos el número de guardias llegaba a las ocho o nueve, con las consiguientes libranzas postguardia. Haciendo cálculos, hemos visto que el período formativo de los MIR podría estar un poco en cuestión, puesto que con cada descanso se pierde una mañana de formación», explicó a Ical la directora general de Recursos Humanos de Sacyl, Esperanza Vázquez, quien precisó que, aún con la nueva medida, el cómputo semestral de libranzas son 52,5 horas que no dedican la formación. «No obstante, esta cifra encaja y es aceptable», apuntó.
Excepciones
Aunque en un principio se trata de una decisión lineal, podrían plantearse algunas excepciones en función de las propuestas de los gerentes y de las comisiones de docencia de los centros para compaginar calidad asistencial, formación y funcionamiento de las unidades y servicios.
«En algunos casos seremos flexibles, ya que las circunstancias pueden variar entre centros y el año de residencia. Por ejemplo, un R1 cuenta siempre con un tutor, pero a medida que ascienden de año asumen responsabilidades, hasta llegar al punto de que un tutor tiene varios MIR, que la tutoría puede realizarse a distancia… Seremos flexibles en función de las necesidades», puntualizó Vázquez.
La medida ya está en todas las gerencias, con el fin de que vayan reorganizando sus recursos y que en un par de meses esté ajustada.
El hecho de limitar las guardias, también tendrá sus efectos en las arcas de Sanidad, que estima ahorros de hasta ocho millones de euros en tres años, a razón de 3,5 millones en este 2012 y otros tantos en el 2013 y de un millón en el 2014.
Unidades docentes
En estos momentos, Castilla y León cuenta con 1.560 residentes en formación, entre Atención Primaria y Especializada, de los que 1.495 son médicos internos residentes y 65 profesionales de enfermería.
En la última convocatoria se cubrieron todas las plazas, 503, una tenencia que comenzó a experimentarse en el curso 2009-2010, pese al aumento de la oferta. En este tiempo, también se han ido aumentado la unidades docentes, que ascienden a 203: 181 especialidades hospitalarias, tres de enfermería y 18 multiprofesionales.