Berlusconi irrumpe por sorpresa en el «mausoleo»
La andanada | Pedro Vicente
Sabedor de que la sesión parlamentaria iniciada ayer constituía su última ocasión de confrontar directamente con el presidente de la Junta, el portavoz socialista, Oscar López , anticipó diez días la fecha real del aniversario para preguntar a Juan Vicente Herrera por su balance sobre el primer año del gobierno de Mariano Rajoy .
Tras hacer notar a López su anticipo temporal, Herrera no se anduvo con ambages a la hora de reconocer que 2012 ha sido un año negativo —muy negativo, dijo— para los intereses de Castilla y León, sobre todo si se toma como parámetro la evolución del paro. Tras dicho reconocimiento, el portavoz socialista se vino arriba y reprochó al presidente, bien su corresponsabilidad con el gobierno central, bien su responsabilidad directa, en todos los recortes padecidos tanto por la mayoría de los sectores económicos (desde la minería a la agricultura, pasando por las renovables o la industria, con la excepción de la automoción) como por los servicios públicos. Y ello provocó la réplica que era de esperar sobre la herencia recibida por el gobierno Rajoy. El corolario final de la intervención final del presidente fue un tanto sorprendente, ya que vinculó el «discurso catastrofista» de López a la situación que ha provocado en Italia la reaparición de Berlusconi .
La pregunta del procurador de IU, José María González , discurría por los mismos derroteros, pero con una formulación que molestó claramente a Herrera, a quien no le gustó nada que la calificación de Castilla y León como «una comunidad zombie». El presidente de la Junta echó mano del contenido de las ponencias que debatirá IU en su próxima asamblea federal para aplicar esa misma calificación a la formación izquierdista. González quiso aclarar que su pregunta era en positivo, pero Herrera ya había cogido la linde programática de IU y solo se apeó de ella para desmentir algunas afirmaciones contenidas en los «antecedentes» de la pregunta, como la de que la Junta ha evitado acogerse al FLA emitiendo bonos a ocho meses.
Abierto el turno de preguntas a los consejeros, el socialista leonés Javier Campos suscitó de nuevo el conflicto de la minería, mas que nada para acusar a Antonio Silván de «traición a León», al no haber apoyado determinadas propuestas formuladas por los socialistas en un anterior pleno de la Cámara. El consejero de Economía, Tomás Villanueva , defendió la postura adoptada al respecto por el grupo popular, respaldando plenamente los argumentos empleados en aquel debate por la procuradora berciana Mar González Pereda. Y ahí quedó la cosa.
Donde no hubo discrepancia fue en la defensa de los Paradores de Turismo. Preguntada por el leonesista Alejandro Valderas , la consejera del ramo, Alicia García , manifestó el rechazo frontal de la Junta al cierre temporal (cinco meses al año) de seis de los quince paradores existentes en Castilla y León. Valderas pidió a la consejera que canalice la amplia oposición institucional y social suscitada por dicha medida, afirmando que «los Paradores son nuestras playas». Eso sí, la consejera no se olvidó de vincular el ERE de Paradores con la mala gestión de los mismos durante el gobierno socialista, si bien no citó expresamente a Miguel Martínez , el leonés que presidió dicha empresa pública en la referida etapa. Toda una deferencia.