Continúa en alza el porcentaje de alumnos que no logran completar la Educación Secundaria en Castilla y León

El porcentaje de abandono educativo temprano en Castilla y León creció en el curso 2010-2011 tres puntos y medio respecto al 2001-2002, según la estadística La Educación en España en su edición de 2013 del Ministerio de Educación. El informe revela que en el año 2001 el porcentaje de estudiantes de entre 18 y 24 años de edad que no habían completado el nivel de Educación Secundaria en su segunda etapa y que no seguía ningún tipo de educación o formación se situó en el 22,9 por ciento, cifra que se elevó al 27,3 por ciento en el último curso de referencia.

Además, por primera vez en los últimos años, este porcentaje supera la media nacional en el periodo de estudio, al registrar un 27,3 por ciento de estudiantes de entre 18 y 24 años que no ha completado la Secundaria, frente al 26,5 por ciento del conjunto nacional, que baja respecto a 2001 y 2006, periodos establecidos de referencia. Así, mientras en Castilla y León se pasó de un 22,9 al 23,8 y al 27,3, en España aunque creció del 29,7 por ciento al 30,5 por ciento y bajó en el último ejercicio de estudio al 26,5 por ciento.

Por sexos, en Castilla y León los hombres continúan en peor situación que las mujeres en este aspecto. Así, en 2011 el porcentaje de los varones fue del 32,9 por ciento, frente al 21,3 de las féminas. Comparado con los otros datos de estudio, en el caso de los hombres, ha crecido respecto al 30,1 por ciento de 2001 y 2003, mientras que el de las mujeres también se incrementó al pasar del 15,3 al 17,1 por ciento en 2001 y 2006. Además, el dato de los varones se sitúa por encima de la media nacional del 31 por ciento, mientras que el de las mujeres es inferior al 21,9 por ciento de España.

Además, si se tiene en cuenta el nivel de formación de la población joven, es decir, los de 20 a 24 años de edad que han completado al menos el nivel de Secundaria en su segunda etapa, los porcentajes globales en Castilla y León han bajado del 69,7 por ciento en 2001 al 60,7 por ciento en 2011. En este caso, la cifra es más baja que en España donde se pasó del 65 por ciento en 2001 al 61,7 por ciento en 2008.

Por sexos, en 2001 acabaron estos estudios el 62,5 por ciento de los hombres, frente al 50,7 por ciento de 2011 y el 77,1 y el 71,3 por ciento de las mujeres respectivamente. En el conjunto del país, se pasó en los hombres del 58,8 por ciento al 54,5 y del 71,4 al 69,2 por ciento en las féminas, según la estadística del Ministerio de Educación a la que ha tenido acceso Ical.

Idoneidad de los alumnos

La estadística estudia también la tasa de idoneidad de los alumnos en España, es decir, el alumnado que progresa adecuadamente durante la escolaridad obligatoria, de forma que realiza el curso correspondiente a su edad. Esta variable se estudia por las edades que marcan el inicio de los ciclos segundo y tercero de Educación Primaria, para la edad teórica del comienzo de la ESO (12 años) y para las de los dos últimos cursos de esta etapa (14 y 15 años).

Así, en el curso 2010-2011, el 92,7 por ciento de los alumnos de ocho años estaban en el curso que les correspondía por debajo del 96,2 de hace diez años y del 93,5 del conjunto nacional. Asimismo, a los diez años el porcentaje fue del 87,6 por ciento, también por debajo del curso 2000-2001 que se situó en el 93,8 por ciento y el de España del 88,6 por ciento.

Por su parte, a los doce años estaban en su curso el 82,5 por ciento, frente al 88 de diez años antes y del 83,7 por ciento de España. Los porcentajes bajan en el tramo de los 14 años hasta el 68,5 por ciento, frente al 72,6 que estudiaban en su curso diez años antes. En esta variable Castilla y León ya se encuentra por debajo de España, donde se dio una cifra del 68,9 por ciento.

Del mismo modo, el 59,5 por ciento de los alumnos de 15 años estaba matriculado en el curso que le correspondía en 2010-2011, por debajo de España que se situó en el 61,2 por ciento pero por encima de la registrada en el curso 2000-2001 del 59,3.