EL ESTADO DE LA COMUNIDAD
72 parados más al día hasta los 244.089
Castilla y León acumula 23.951 desempleos más desde el anterior Debate sobre. el Estado de la Comunidad y lleva perdidos 51.200 puestos de trabajo en un año.
244.089. Esa es la cifra absoluta y demoledora de parados registrados en Castilla y León a la que Juan Vicente Herrera deberá dar respuesta en menos de diez días en las Cortes. Son 23.951 más que en julio del año pasado cuando esbozó con realismo el estado de la Comunidad en el quinto año de crisis en España.
Hoy suma y sigue. ¿Por qué la segunda recesión del siglo XXI nos deja una estela de 72 desempleados más cada día con una más que notable destrucción de puestos de trabajo? ¿Está cambiando la tendencia? ¿Hay recetas para invertir la situación?
El debate sobre Política General estará inevitablemente muy centrado en el paro y en el empleo. Es lo que más preocupa a los ciudadanos y es el eje prioritario del trabajo queJunta y oposición ya tienen perfilado.
La última tasa de paro publicada revela que en Castilla y León 22,7 de cada cien personas en edad y condición de trabajar no tienen empleo. En el conjunto de España la cifra sube a 27,1. Podría decirse que la evolución autonómica es mejor si no fuera porque el diferencial se ha ido reduciendo y los últimos indicadores apuntan a un incremento anual del desempleo del 6,4% en la Comunidad y del 3,7% en el conjunto del país.
Los analistas sostienen que Castilla y León entra siempre más lentamente en las crisis y sale más despacio de ella. El sexto año de consecutivo de dificultades económicas deja un aumento de 141.000 parados, mucho más del doble del que existía en junio de 2007 (102.387).
La Encuesta de Población Activa del primer trimestre de este año, el último dato oficial que sus señorías manejarán el día 26 en el llamado debate del estado de la Comunidad, revela una pérdida de 51.200 empleos en doce meses: 140 cada día. Si atendemos a la estadística del INE, el desempleo ha dejado en la calle a 36.700 castellanos y leoneses entre marzo de 2012 y marzo de 2013.
La segunda recesión golpea con mayor dureza a la Comunidad autónoma que a la media española. No sólo porque se destruye más empleo (5,4% de caída de ocupados frente al 4,5% en España), sino porque el paro crece más deprisa (16,2% frente al 10%).
El desempleo de los menores de 25 años supera ya el 50%. Es superior en el conjunto de España, entre otros motivos porque la Comunidad pierde población activa en esta franja de edad.
El notable aumento del paro es la consecuencia más dramática de una actividad económica deteriorada y la pérdida permanente de tejido industrial en un contexto de atonía inversora sin precedentes. Castilla y León llega al debate sobre política general con cinco trimestres consecutivos de retroceso de su Producto Interior Bruto, tras un 2011 que representó un paréntesis entre la primera y la segunda recesión del siglo.
¿Se ha tocado suelo? Está por ver. Sin el excelente ejercicio agrario (el PIB del primer trimestre en el sector primario fue el único en positivo), el paro habría dado más disgustos a más familias. Sin el empuje de las exportaciones, el desempleo habría sido aún mayor.
Las familias de Castilla y León hoy consumen menos que hace un años. A la recesión diaria ya se une el temor a que la crisis se agudice. No hay confianza y las inversiones siguen en caída libre (—7,3%, último dato publicado). Una tendencia que la obsesión por la austeridad y la lucha contra el déficit han animado mientras que las políticas de crecimiento todavía brillan por su ausencia.