Hay que innovar como si la recesión fuera algo del pasado
Las empresas fuertes de la Comunidad piensan en futuro .
Ya no ven su negocio sin mirarlo a través de la investigación, el desarrollo y la innovación. Creen, de hecho, que por eso subsisten y por lo mismo despuntan incluso cuando a veces no palpan resultados de inmediato. «Es más difícil porque no ves el retorno enseguida», explica Javier Hernando, de Nicolás Correa, puntera en maquinaria industria, quien añade: «La Administración da menos ayudas, pero nosotros hemos mantenido el esfuerzo porque si no, tienes la vida muy corta. Probablemente, de ahí el crecimiento general del porcentaje de gasto».
Una afimación que comparten otros directivos. También que el ‘adelgazamiento’ de los recursos de la Universidad hace que la empresa «tenga que hacerse más fuerte».
Gerardo Gutiérrez, presidente de la farmacéutica Gadea, cree que en I+D el sector privado saber mirar más lejos que el público, «anticipa el cambio de ciclo, piensa en futuro y no está condicionado por las políticas donde prima el sobrevivir al día sin importar el mañana». Sólo vislumbra el horizonte del final de la crisis «manteniendo la contribución en I+D». «Cuando vienen mal dadas hay que recortar y siempre es una tentación hacerlo de ahí, pero hay que buscar un equilibrio y no comprometer el futuro. Si no introducimos mejoras, no competimos y la base del conocimiento de las compañías es la I+D».
Carlos Moro, presidente de Matarromera, atribuye el aumento de protagonismo de las empresas a un cambio de mentalidad. «Hay más concienciación. Somos concientes de que se necesitan terminar los proyectos y en épocas de crisis no puedes desbaratar equipos e investigaciones porque dejarías de tener una posición estratégica. Al disminuir las subvenciones de la Administración, le toca a la empresa aportar ese esfuerzo».
En sintonía se pronuncia Tomás Castro, director general de Proconsi, empresa leonesa TIC, que explica cómo en su sector «o se está en la punta tecnológica y a la última o uno se queda atrás y está muerto». Por ello, ha mantenido constante su inversión en I+D. Opina que las cifras responden a que «muchos empresarios saben que poco a poco se saldrá de la crisis y el gasto en investigación, desarrollo e innovación hará que se esté ahí arriba».
Jesús Sanz, director de estrategia y gestor de proyectos I+D+i de la burgalesa CSA, añade una ‘d’ más a la ecuación: «Ahora es ‘dirigida’». «Implica mayor riesgo por lo que nos toca ser más selectivos y no investigar tantos proyectos, pero siempre mantenerla».
El director de Telefónica I+D, Antonio Ferreras, cree que las empresas apuestan por la investigación y la innovación porque «en crisis éstas tienen mayor importancia y es fundamental tener un alto retorno y adquirir ventaja con valor añadido».
Desde Gullón, Eva Lamalfa, directora de comunicación, aunque reconoce que su producto, las galletas, no se ven demasiado perjudicadas por la crisis, considera que muchas compañías «ya se han dado cuenta de que para tener un buen producto tienes que invertir en él» y «con el consumo estancado hay que optar por la internacionalización, donde solo se puede acudir diferenciándose».
José Luis Angoso, director de innovación de la experta en tecnología Indra, asegura que la innovación le reporta «todo» a su empresa. «La dificultad real radica en la priorización de tus recursos», pero considera que ya está extendida la confirmación de que «la innovación es la principal vía para competir con éxito».