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Lacalle mantiene el bulevar pese a la revuelta: «Los violentos no gobiernan»

PP, PSOE y UPyD condenan los actos de Burgos, donde hubo 17 detenidos y 8 heridos.

La tarde noche de ayer, sábado, hubo manifestación en el lugar de los hechos.

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a. domínguez | burgos
León

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«El Estado de Derecho no va ni puede claudicar ante la violencia». Así de contundente se mostraba en la mañana de ayer el alcalde de Burgos, el popular Javier Lacalle, tras una noche infernal que le había deparado muy pocas horas de sueño.

El proyecto de reordenación urbanística para la conversión de la calle Vitoria en un bulevar, en Gamonal, se seguirá ejecutando, pese a la batalla campal ocurrida en la noche del viernes, que se saldó con la detención de 17 personas –la mayoría de edades entre los 20 y 23 años, aunque hay un menor de edad–; que dejó heridos leves a ocho agentes de la Policía Nacional y desperfectos en el mobiliario urbano. La Comisaría de Burgos instruye las diligencias que entregará en el Juzgado.

Desde la Alcaldía no se ocultaba el pesar por estos hechos, y especialmente la tristeza de que unos cuantos puedan proyectar una imagen tan deforme de Burgos.

«Las obras seguirán tal como establece el proyecto, que recuerdo fue consensuado y estudiado con una veintena de asociaciones vecinales, obteniendo el respaldo de todas ellas, salvo una. Estamos haciendo justicia urbanística, llevando calidad de vida a un barrio que siempre se consideró olvidado por la ciudad a la que también pertenece. Los violentos no van a gobernar ni este ayuntamiento ni nuestras vidas», enfatiza.

Quiénes son

El enigma sobre quiénes eran las personas que encendieron en la noche-madrugada de ayer la llama incendiaria se resolvía hoy. La Policía había detectado días atrás comunicaciones en las redes sociales de grupos antisistema, radicales y los llamados profesionales de la kale barroca, que convocaban a una reunión este fin de semana en Burgos para provocar algaradas y destrozos utilizando como excusa la obra de Gamonal.

Fue precisamente esa advertencia lo que motivó que Lacalle, junto con el subdelegado y los responsables policiales idearan una estrategia a seguir para prevenir la batalla campal. Fueron requeridas unidades de antidisturbios, llegados hace días desde Valladolid; se estableció el dispositivo policial apropiado para intentar contener la protesta; e incluso estaba organizado un operativo de limpieza para atajar a las pocas horas los efectos de la bronca nocturna.

El barrio de Gamonal en Burgos volvió anoche a ser escenario de graves incidentes, que han obligado a los antidisturbios a efectuar varias cargas, al término de una manifestación. Los antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía han cargado contra un grupo de unas doscientas personas, la mayoría jóvenes, que han quemado contenedores y han causado daños en el mobiliario urbano de la Calle Vitoria. Los manifestantes han quemado media docena de contenedores y han arrojado piedras y adoquines a la policía, además de ocasionar daños en mobiliario urbano y en dos sucursales bancarias, del BBVA y Caja3.

Estos incidentes se han producido después de una manifestación que por la tarde había partido del barrio para dirigirse a una comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, para pedir la libertad de los 17 detenidos, uno de ellos menor, en la noche anterior. La marcha, convocada de forma espontánea congregó a un millar de personas, regresó al barrio, con menos participantes, y a su término comenzaron los disturbios.