La Comunidad exporta 2 millones de euros a Rusia
La decisión de Rusia de prohibir desde ayer las importaciones de frutas y hortalizas, carne de cerdo, ternera y pollo, leche y productos lácteos, queso y pescado de la Unión Europea, EEUU, Australia, Canadá, y Noruega, tendrá una escasa repercusión en la balanza exterior de la Castilla y León. No en vano, la Comunidad exportó alimentos a Rusia el pasado año, por 15,75 millones de euros, de los que sólo 1,5 millones eran de carne, 197.888 euros de lácteos y huevos y 36.240 de frutas y legumbres. El mayor volumen de ventas a la federación, se concentró en azúcar, café y cacao, con 8,51 millones, y en grasas y aceites, con 3,77 millones.
La cifra de exportaciones de alimentos frescos a Rusia resulta testimonial si se tiene en cuenta que las ventas de la Comunidad a este país ascendieron el pasado año a 70,26 millones de euros; y que Castilla y León exportó productos a todo el mundo por 12.219,71 millones. Asimismo, las importaciones alimentarias desde Rusia por parte de la Comunidad alcanzaron el año pasado los 4,2 millones, casi la totalidad en piensos animales. Las importaciones globales desde la federación ascendieron a 13,28 millones de euros, con lo que la balanza comercial de la Comunidad con Rusia es positiva en 56,98 millones.
Otros vetos
Este no es el primer varapalo a las relaciones comerciales alimentarias con la Federación Rusa que sufre la Comunidad, ya que las restricciones al porcino por «motivos sanitarios» han sido habituales desde este país a los ganaderos regionales. En este sentido, cabe recordar la última, el año pasado, cuando a finales de mayo, Rusia suprimió la autorización para exportaciones de carne de cerdo a su país a todos los mataderos de Castilla y León. La consecuencia inmediata fue el desplome de las exportaciones cárnicas que ahora se vuelven a prohibir en su totalidad, que pasaron de 4,6 millones de euros en 2012, a apenas 1,5 el año pasado. Las autoridades nacionales y autonómicas dudaron entonces de la excusa sanitaria de los rusos y apuntaron a intereses de mercado interior y para potenciar relaciones con otros estados.