Las Edades esperan al papa

A velocidad de crucero, sin lastrar las señas de identidad que le han convertido en uno de los principales acontecimientos culturales en la España del último cuarto de siglo, Las Edades del Hombre envejecen con solera y también esperan al papa Francisco en 2015, en torno a santa Teresa de Jesús.

Sus exposiciones de arte sacro, que desde 1989 han recibido más de diez millones de visitantes en diecinueve entregas, han reducido ahora su formato lejos de las catedrales, acotado la temática y consolidado la presencia del arte contemporáneo, todo ello con el auxilio de las nuevas tecnologías y la autenticidad de siempre. «No basta con que se hayan convertido en un acontecimiento cultural y turístico de primer orden porque cada edición, ahora fuera de las sedes episcopales, es el resultado de la historia humana y religiosa de un pueblo que hay que plasmar. Este es el verdadero valor y el resto, el éxito de público y económico, es una consecuencia de ello. No lo debemos olvidar», recuerdadado Gonzalo Jiménez, secretario general de la Fundación Las Edades del Hombre.

Con la vista puesta en Ávila y Alba de Tormes (Salamanca), cuna y sepultura de santa Teresa (1515-2015), como sedes de la exposición programada para 2015, Las Edades del Hombre engastan en Aranda de Duero (Burgos) el decimonoveno eslabón («Eucharistia») de una trayectoria que ha tenido muchas imitaciones en España y casi ninguna con éxito.

La Junta «siempre ha apostado por este proyecto, otra de las claves de su éxito», constató el secretario general, quien no descarta la presencia del papa Francisco en España durante 2015 y, en este caso, la posibilidad de que se acerque hasta Ávila o Alba de Tormes (Salamanca) para ver la exposición. «Todos estamos muy esperanzados en que venga a nuestro país y pueda ver una parte de Las Edades del Hombre», añade.