Saez plantea un «cambio cultural» en el Sacyl que «estimule a los mejores»

El consejero de Sanidad de Castilla y León, Antonio Saez, anunció ayer su intención de promover un «cambio cultural» en Sacyl «que facilite el compromiso y la autonomía de los profesionales y reconozca y estimule a los mejores».

Durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda para detallar el proyecto de presupuestos para su departamento en 2015, Saez argumentó que los 3.267 millones de euros con los que contará su Consejería, el 2,35% más que en 2014, «permitirá mantener y mejorar» el sistema público de salud.

A este fin contribuirá, en palabras de Saez, la convocatoria de «más de 1.000 puestos de trabajo», así como los concursos de traslado internos, que afectarán también a miles de empleados de Sacyl.

El consejero aseguró que «una sanidad pública accesible y de calidad es una prioridad y un compromiso explícito» para la Junta de Castilla y León, por lo que en 2015 podrá «dinamizar las inversiones sanitarias después de algunos años de ralentización». En concreto, recordó que la dotación presupuestaria para inversiones en infraestructuras hospitalarias ascenderá a 85,11 millones de euros, el 29 por ciento más que en el presente ejercicio, entre las que ha destacado las obras en el Complejo Hospitalario de Salamanca, con 32,6 millones.

El consejero remarcó que la apuesta del Ejecutivo autonómico por este departamento se refleja en que «casi el 50 por ciento de los recursos no financieros disponibles para todas las Consejerías» van a Sanidad, son 75 millones de euros adicionales.

Atención Primaria contará con «mayores recursos, «especialmente en el mundo rural».

Críticas a la oposición

Saez remarcó que los problemas de la sanidad de los que habla el PSOE, entre los que citó el copago farmacéutico, el cierre de camas y la disminución de sustituciones, «no han tenido un efecto negativo en la atención», sino que han requerido un «esfuerzo» a los pensionistas y a los profesionales sanitarios.

Sobre el copago, la portavoz socialista alertó al consejero de la posibilidad de convertirse en el «único forofo» de la ministra de Sanidad, como promotora de esta modificación en las condiciones del copago farmacéutico. «Medítelo porque se puede quedar solo y un forofo solo es una tristeza», resumió. «Tiene usted una fijación con la señora Mato, una cuasi-obsesión», consideró Saez, quien comenzó por reconocer que la modificación del copago farmacéutico ha supuesto un «esfuerzo para los pensionistas, pero introdujo un elemento de progresividad que es positivo.