Burgos pide a la Unesco ser ciudad gastronómica
La candidatura que se fallará a final de año liga su proyecto a la evolución humana.
Burgos aspira a convertirse en un laboratorio mundial de la evolución gastronómica como eje fundamental de la candidatura para ser declarada ciudad creativa por la Unesco en la especialidad de gastronomía, según informó ayer en una rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle.
El alcalde presidió la constitución de un grupo de trabajo para preparar la candidatura del que forman parte más de una decena de entidades y veinticinco personas, tanto de las áreas gastronómica y turística como económica y científica.
Hasta el momento solo hay siete ciudades del mundo declaradas ciudades creativas por su valor gastronómico, entre ellas solo una en Europa, concretamente en Suecia.
Lacalle considera que la vinculación de gastronomía y evolución, apoyada por la capacidad científica del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana, es un sello distintivo que puede hacer que la Unesco apruebe la petición de Burgos.
El gerente de la Asociación Plan Estratégico, que coordinará los trabajos de preparación de la candidatura, Mario San Juan, explicó que se trata de estudiar la evolución de la gastronomía en relación con la evolución humana y las enfermedades en distintos lugares del mundo, pero también de hacer una previsión de futuro.
Previsión de fechas
Lacalle explicó que en las próximas semanas, antes incluso de que la Unesco apruebe las condiciones para la convocatoria de este año, se irá avanzando en la elaboración de la documentación para avalar la candidatura, que estará lista para el mes de abril.
La resolución de la Unesco se conocerá en el último trimestre del año y, aunque reconoció que lograr el nombramiento es «un reto complicado», Lacalle se mostró convencido de que será «posible» porque Burgos ya fue capital española de la gastronomía en 2013 y vincular evolución y gastronomía es algo que «no está a disposición de ningún otro lugar». Por estas razones se mostró optimista respecto a la posibilidad de obtener una distinción que tienen ciudades muy distintas por tradición gastronómica, añadió.