Hacienda condona 73,8 millones a la Junta por cumplir con el déficit ítulo cuerpo 38 para noticias principales 4 líneas
Castilla y León se suma a Galicia y La Rioja por no haber acudido al Fondo de Liquidez.
Antonio Beteta, ayer.
Más de 73,8 millones ha «condonado» el Ministerio de Hacienda a Castilla y León en compensación por no haber acudido al Fondo de Liquidez Autonómica y cumplir con los objetivos de deuda, déficit y pago a proveedores, unos fondos que se han aplicado en 2015 a sanidad, cooperación local y medio ambiente.
Esta especie de «condonación» por ese buen cumplimiento en consolidación fiscal se articuló ayer en forma de convenio de colaboración para financiar inversiones por esos 73,87 millones de euros, que firmaron la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, y el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta. Beteta se limitó a la firma del convenio, que sólo ha suscrito el Ministerio con otras dos comunidades cumplidora, Galicia y La Rioja, ya que al haber comenzado la campaña electoral no puede hacer «declaraciones», según advirtió.
Del Olmo explicó que esos casi 74 millones se corresponden con la devolución negativa de la liquidación de los años 2008 y 2009, que le correspondía pagar a Castilla y León. Ese dinero se ha destinado a gastos de inversión de 2015, en concreto a cooperación local, sanidad y medio ambiente.
La consejera de Economía y Hacienda repasó los mecanismos de mejora de la liquidez y para financiar los gastos de las autonomías puestos en marcha por el Gobierno, como el fondo para financiar el pago de proveedores, al que se acogió la Comunidad en el 2012, con 1.052,4 millones que permitieron pagar casi 300.000 facturas de más de 2.000 proveedores, fundamentalmente sanitarios. Del Olmo valoró el Fondo de Liquidez Autonómica, el FLA, al que la Comunidad no se ha acogido aunque ha permitido a muchas comunidades «con dificultades para financiarse», poder seguir prestando los servicios esenciales que tienen encomendados. Otro de los mecanismos fue el ampliar de cinco a diez años el plazo para devolver las liquidaciones del sistema de financiación, fraccionadas ahora a veinte años.