Medinaceli se cita esta noche con su toro júbilo sin estar ajena a la polémica
efe | soria
Medinaceli, en Soria, se cita esta medianoche con su toro jubilo, el único toro de fuego que pervive en Castilla y León, en una tradición milenaria envuelta en los últimos años en la controversia entre los antitaurinos, que piden su abolición, y los partidarios de su mantenimiento. La Subdelegación del Gobierno de la provincia, como en los últimos años, ha previsto un amplio dispositivo de seguridad para evitar incidentes y que los antitaurinos, como sucedió hace dos años, intenten boicotear el festejo. El ritual goza de protección tras ser declarado por la Junta de Castilla y León de interés turístico regional.
Como prólogo del festejo, la asociación toro jubilo y las peñas taurinas de Soria han convocado, a las seis de la tarde, una manifestación para defender esta tradición y otras taurinas populares.
El alcalde de Medinaceli, Felipe Utrilla, explicó que la posición de la corporación será la de defender el rito mientras los vecinos se manifiesten favorables a su pervivencia. Se trata de una tradición que se celebra desde finales del siglo XVIII de forma ininterrumpida y, al menos una vez año.
Como en anteriores ocasiones, un toro será atado a un madero, en la plaza mayor medinense a las 23.30 horas de la noche, y los mozos del pueblo le embadurnarán de arcilla, antes de colocarle la gamella con dos grandes bolas de pez que mantendrán el fuego durante minutos, con el astado dando vueltas por el ágora.