Preocupación por el futuro de los talleres de Renfe en Valladolid
CC OO recuerda el anuncio del pasado martes sobre la «presunta disolución» de la sociedad.
efe | valladolid
Comisiones Obreras de Castilla y León, a través del Sector Ferroviario, mostró ayer su preocupación por el futuro de los talleres de Renfe en la capital vallisoletana después de la «presunta disolución» de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV) anunciada el pasado martes. A juicio de este sindicato, «esta determinación puede traer graves consecuencias para el conjunto de la ciudadanía vallisoletana y, muy especialmente, para los trabajadores de los talleres de Renfe en Valladolid (BMI)».
CC OO recordó en un comunicado que, desde el pasado mes de marzo, viene insistiendo en que la demora en el traslado a las nuevas instalaciones del Páramo de San Isidro, y el «incumplimiento reiterado» de los plazos ponía en peligro su viabilidad futura en cuanto al empleo y la asunción de nuevas cargas de trabajo, «principalmente del mantenimiento de los trenes de la serie 103».
Por todo ello, este sindicato hizo ayer «un serio llamamiento» a todas las administraciones afectadas a actuar «con responsabilidad» para dar una solución al traslado de los talleres. El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, comunicó el pasado martes tras la reunión del Consejo de Administración de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (SVAV) que en enero habrá una Junta General de Accionistas en la que se planteará como «solución más clara» la convocatoria de un concurso de acreedores.
«Esta sociedad tiene una situación económica muy complicada porque no hay recursos para hacer frente a la deuda, así que se entendió por responsabilidad que lo más razonable es instar a este concurso de acreedores sin descartar que la operación ferroviaria siga adelante por otras vías», subrayó.