La Junta añade a la cartera sanitaria el embarazo asistido
La medida reconoce el derecho de madres solteras y parejas lesbianas a tener hijos.
efe | valladolid
El acceso de mujeres sin pareja masculina a las técnicas médicas de reproducción asistida «se facilita» en la mayoría de Comunidades Autónomas, pero no está incluido en sus respectivas carteras de servicio, algo que ahora la Junta de Castilla y León se plantea hacer «de forma expresa». Puede que incluirlo o no en la cartera de servicios carezca de efectos prácticos si realmente los hospitales prestan ya este servicio, pero al hacerlo la Sanidad de Castilla y León daría un paso más en el reconocimiento de derechos, tanto para mujeres que deciden ser madres en solitario como para parejas de lesbianas, que desde hace años reivindican igualdad de derechos en el acceso a estas técnicas.
Cada año se realizan en los hospitales públicos de Castilla y León una media de 15.200 pruebas y técnicas de reproducción asistida, más de 90.000 entre 2010 y 2015, según los datos aportados por la Consejería de Sanidad. Las pruebas más realizadas son las ecografías de seguimiento folicular, con más de 50.000 en los seis años citados, mientras que el denominado recuento de espermatozoides móviles suma casi 14.000 pruebas y la técnica de la inseminación artificial con semen de la pareja supera las 10.000 en este mismo periodo.
El caso de las inseminaciones artificiales con semen de donante, que pueden estar más asociadas a casos de mujeres sin pareja, el número no ha superado los doscientos en ninguno de los años analizados, con 124 casos en 2010, 189 en 2011, 130 en 2012, 149 en 2013, 160 en 2014 y 187 en el último de los analizados, el 2015.
Por hospitales, los que ofrecen un mayor catálogo de técnicas son los vallisoletanos, principalmente el Clínico Universitario, pero también el Universitario Río Hortega, que acaparan buena parte de las técnicas más específicas y que no ofrecen el resto de complejos hospitalarios públicos de la Comunidad.
Entre esas técnicas figuran las punciones foliculares, con 3.772 usos en los ejercicios analizados, pero también los denominados ciclos puncionados DGP (3.238) y los ciclos transferidos DGP (2.341), y otras menos comunes como la criopreservación de la fertilidad y la biopsia testicular, entre otras.
Entre 120 y 150 bebés
En una Comunidad como Castilla y León, con problemas de natalidad y de despoblación, el uso de estas técnicas sirve para que cada año nazcan entre 120 y 150 bebés vía fecundación in vitro, según el jefe de la unidad de reproducción asistida del Clínico de Valladolid, el doctor Luis Rodríguez-Tabernero. El Clínico de Valladolid fue el pionero en la Comunidad con la primera unidad de tratamiento de inseminación artificial en los años 80, y dio el «salto fundamental, que marca la diferencia de los resultados de éxito, a la fecundación in vitro en 1994».