Movilización ciudadana contra el abuso de los peajes
La León-Astorga sigue a la espera de soluciones para aliviar la N-120.
g. f. | león
El cabreo ciudadano contra los peajes abusivos crece. León sigue esperando una solución clara al peaje de la AP-71 para desviar por esta vía el tráfico pesado que satura los tramos urbanos de la carretera N-120 totalmente saturada de vehículos —muchos de ellos pesados— que atraviesan a diario las poblaciones de esta vía hasta conectar en Astorga con la autovía. La idea es bonificar hasta en un 75% la tasa de la León-Astorga para animar a los conductores a no elegir la N-120.
Sin embargo, en otras provincias de la comunidad como en Ávila han dado un paso más allá. Varios cientos de personas se concentraron ayer ante la Subdelegación del Gobierno de Ávila para protestar contra la «sanguijuela económica» de los peajes en las autopistas AP-6 (Las Rozas-Adanero), AP-51 (Villacastín-Ávila) y AP-61 (Villacastín-Segovia).
Convocados por la Plataforma Ávila Libre de Peajes, los concentrados han coreado en varias ocasiones el lema de «¡No al peaje!», después de que los representantes de esta plataforma puesta en marcha hace ocho meses registraran un escrito para solicitar la ejecución de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TSUE).
Asimismo, han presentado ante la Subdelegación del Gobierno las 40.000 firmas recogidas hasta el momento para solicitar la ejecución de la sentencia dictada en abril de 2010 por el TJUE, declarando ilegal la concesión otorgada en 1999 a Castellana de Autopistas (Iberpistas, hoy Abertis).
Se trata de una concesión para la construcción, conservación y gestión de la AP-6, AP-51 y AP-61, cuya reversión al Estado han solicitado los asistentes a esta concentración, ya que la concesión inicial de la explotación de la AP-6 finaliza este lunes, 29 de enero.
Por otra parte, el secretario general de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, exigió ayer que la autopista de peaje AP-6 (Las Rozas-Adanero) y sus conexiones con Ávila (AP-51) y Segovia (AP-61), sean libres de pago antes de que acabe enero, cuando acaba la última concesión legal para la AP-6.
En declaraciones a los medios de información, con motivo de su participación en una jornada de debate sobre el territorio celebrada en La Granja (Segovia), Fernández ha explicado que la mejor solución es que sea el propio Estado quien gestione estas vías.
A su juicio, es «absolutamente calamitoso» que la AP-6 con las recientes nevadas esté incluso en peor estado que carreteras nacionales, un hecho que supone además un nuevo ejemplo de cómo la gestión privada es «mucho peor que la pública», ha subrayado.
En este sentido, quiso recalcar también que una empresa concesionaria siempre va a tratar de lograr su mayor beneficio económico y se despreocupa de garantizar la seguridad de los conductores, que en estos casos «es lo más importante».
Asimismo, ha insistido en que esta decisión es una simple cuestión de «voluntad política» y recordado que Podemos ha presentado tanto en el Congreso de los Diputados como en las Cortes de Castilla y León iniciativas que buscan este fin.
De no lograrse el objetivo antes del 29 de enero, ha anunciado que Podemos se unirá a las movilizaciones convocadas por los agentes sociales para la liberalización del peaje y la recuperación de la gestión pública. EFE