Casi el 60% de quienes se examinan para entrar en Formación Profesional aprueba

s. calleja| valladolid

Más de la mitad de los alumnos que se presentó a finales de junio a las pruebas para entrar en ciclos de grado medio y grado superior de Formación Profesional en Castilla y León superó el examen, a lo que se une que los resultados mejoraron casi diez puntos porcentuales —9,08— sobre los datos de 2017. La mejoría se registró tanto en los resultados de la prueba de acceso a ciclos formativos de grado superior como de grado medio, donde la ratio de aprobados creció en 12,2 puntos porcentuales.

Así lo indican los datos facilitados a Ical por parte de la Consejería de Educación, desde donde precisan que estas pruebas se dirigen para integrar en el sistema de FP a aquellos alumnos que carecen de título título de graduado en ESO, Bachiller, universitario, técnico o técnico superior, y pretenden acreditar que quienes acceden a la formación cuentan con conocimientos y habilidades suficientes para aprovechar los ciclos.

En concreto, de los 1.370 alumnos que se presentaron a la prueba para acceder a un grado medio la superaron 752 alumnos, un 54,89 por ciento. Si se comparan las cifras con las de hace un año, se observa que entonces de presentaron 1.417 alumnos, con 605 aprobados. Es decir, un 42,96 por ciento. En cuanto a los alumnos que se examinaron para poder comenzar a cursar en septiembre algún grado superior, los resultados fueron también mejores a los de hace un año. De los 359 que se examinaron, aprobaron 201, es decir, un 58,49 por ciento, cuando el dato se cerró hace un año en un 52,53 por ciento, convocatoria en la que se examinaron 375 alumnos y sólo 197 aprobaron.

Un 80% encuentra trabajo

Para muchos alumnos que son incapaces de finalizar la ESO, la Formación Profesional se presenta como una alternativa para formarse en determinadas áreas y acceder a un puesto de trabajo cualificado. No en vano, ocho de cada diez alumnos de FP encuentran un trabajo relacionado con su especialidad en el primer año de finalizar esta formación, y en algunos ciclos el grado de empleabilidad es del cien por cien. También, cada vez existen menos rigideces entre sistemas, y hay más alumnos del ámbito universitario que tras finalizar sus estudios cursa algún grado, y alumnos de FP que después acceden a especialidades universitarias, sobre todo en la rama bio e ingenierías.

Procedencia

Lo cierto es que los alumnos que se examinaron de las pruebas de grado medio en junio procedían, en su mayoría, de tercero de ESO, más de la mitad, un 58 por ciento. Después se encontraron los de segundo, con un 26 por ciento, mientras que un 12 por ciento llegaba de otros estudios y el cuatro por ciento restante eran alumnos de primero de ESO. En el caso de los grados superiores, buena parte acababan de finalizar primero de Bachillerato (55 por ciento), mientras que un 36 por ciento procedía de la ESO, y un nueve por ciento de otros estudios.

Dentro de los objetivos de Educación de la especialización y formación de las nuevas generaciones, y para evitar que los alumnos que han abandonado los estudios sin lograr el título de Secundaria se queden en tierra de nadie, en ocupaciones laborales de baja cualificación, el curso pasado la Consejería inició un plan experimental de acompañamiento para estudiantes rezagados para reducir la alta tasa de abandono escolar. El programa proporciona a estos alumnos un curso de refuerzo en lengua y matemáticas y una cualificación profesional de nivel 1, que se lleva a cabo en el primer trimestre. Una vez superado el primer paso, el plan experimental contempla en los centros integrados de FP a lo largo del segundo trimestre una cualificación para obtener la certificación profesional de nivel 2.