La Junta y la DGT se conjuran para acabar con la lacra de los accidentes de trabajo
Un tercio de los siniestros laborales se producen al volante de un coche y ocho de cada diez tienen lugar ‘in itinere’.
Carlos Fernández Carriedo, Virginia Barcones e Inmaculada Matías. NACHO GALLEGO
ical | burgos
La Dirección General de Tráfico (DGT) y la Junta de Castilla y León ponen en marcha en Castilla y León el Protocolo General de Actuación ‘Compromiso por la Prevención en Seguridad Vial Laboral’, de forma que la Comunidad se convierte en la segunda autonomía que impulsa la cooperación entre las dos administraciones, así como con los agentes sociales, sindicatos y patronal, para acabar con los accidentes de tráfico vinculados al trabajo.
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones; el consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, y la jefa coordinadora de la DGT en la Comunidad, Inmaculada Matías, ante la ausencia del director general de Tráfico, Pere Navarro, que no pudo acudir al acto en Valladolid, firmaron el acuerdo. También participaron la directora general de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales, Amparo Sanz, y representantes de UGT, CCOO y Cecale.
Barcones expuso que los accidentes de tráfico tienen unas consecuencias «enormes» por ser un asunto de seguridad pública, de salud pública y un «problema social». La delegada remarcó que no son «casuales», sino «evitables». Por ello, reclamó la «máxima colaboración» e implicación de todas las administraciones, así como de los agentes privados.
En ese sentido, la representante del Gobierno apuntó que la DGT se ha marcado como reto llevar la seguridad vial a todos los ciudadanos, «sea cual sea su entorno». Uno de ellos, expuso, es el ámbito laboral puesto que en 2017 se registraron en España 67.500 accidentes de tráfico vinculados con el trabajo, lo que supuso el 11,5 por ciento de todos los siniestros viales. Además, recordó que se cobraron la vida de 202 personas, 122 ‘in itinere’ y 80 ‘in misión’.
Igualmente, Barcones y Carriedo explicaron que en Castilla y León se produjeron 3.126 accidentes de tráfico laborales, de los que 44 fueron graves y 18 mortales. De ellos, 2.427 fueron ‘in itinere’, es decir accidentes que tuvieron lugar al ir o volver al trabajo, de los cuales diez fueron mortales y 32 fueron graves. Además, el número de accidentes ‘in misión’, aquellos que tienen lugar durante la jornada laboral, fue de 699, de los cuales ocho fueron mortales y 12 fueron graves.
La delegada del Gobierno advirtió de que la principal consecuencia de un accidente es la pérdida de la vida o las heridas que causa a las víctimas, si bien advirtió también de sus efectos económicos, puesto que es una de las grandes causas del absentismo laboral. Barcones insistió en que la acción conjunta y la colaboración es la herramienta «más eficaz» para identificar los factores de riesgo y plantear una gestión preventiva.