Herrera lanza una apelación a respetar la España constitucional en su despedida

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha expresado este martes que sus «dos esperanzas» para la Comunidad es que el diálogo no sea abandonado y que se mantenga la «lealtad» hacia la España constitucional y el modelo de «autonomismo útil».

Herrera ha respondido así al portavoz socialista, Luis Tudanca, en su último cara a cara en las Cortes de Castilla y León, aunque en esta ocasión ha sido de guante blanco al limitarse a hablar del futuro que espera a la Comunidad. El presidente ha remarcado que Castilla y León no puede dejar atrás el Diálogo Social como «factor de estabilidad», pero tampoco el diálogo con la sociedad para conseguir una democracia «más transparente y participativa», así como el diálogo con otros territorios para resolver problemas «muy difíciles» como la financiación autonómica y la «grave y estructural» despoblación.

En su intervención, marcada por las palabras de despedida hacia Herrera, Tudanca ha avisado de que no iba a pedir un balance sobre la legislatura sino que prefería agradecer su compromiso de servicio público que, con «luces y sombras», le había llevado a tratar de hacer «lo mejor para Castilla y León». Por esta razón, Tudanca ha preferido «mirar al futuro», que en su opinión «pinta bien para Castilla y León», por lo que ha optado por mirar «con optimismo y con esperanza». «Nunca he sido partidario de ese tan manido lema de ‘cualquier tiempo pasado fue mejor’, por el contrario me alegra coincidir hoy con su señoría en que lo mejor para Castilla y León está por llegar», ha anticipado Herrera.

El presidente ha confiado en que la Comunidad sea «más moderna, más próspera, más abierta, más equilibrada y también una Castilla y León capaz de aprovechar todas sus fortalezas y al mismo tiempo superar sus evidentes debilidades».

Herrera ha hecho especial incidencia en la necesidad de ofrecer alternativas a los jóvenes, quienes «deben encontrar en Castilla y León las oportunidades que en algunos casos no tienen y que seguramente en algunos casos no tienen también por las debilidades y por los defectos y por las oscuridades de la acción de mis gobiernos durante tanto tiempo».

Ha deseado que la Comunidad mantenga una senda de crecimiento económico «estable y sano», marcado por la industrialización y también por la modernización de la agricultura y la ganadería, pero que sirva también para sostener los servicios públicos y para atender problemas como la violencia machista.

Posteriormente Herrera ha respondido a una pregunta formulada por el portavoz de Podemos, Pablo Fernández, quien le ha pedido un balance de sus últimos años al frente de la Junta, aunque inicialmente ha permanecido en silencio como símbolo del «estruendoso silencio» que se vive en los pueblos despoblados de la Comunidad. «Juan Vicente Herrera, el despoblador», ha sentenciado Fernández como «epitafio» de la gestión de Herrera en materia demográfica, que ve como uno de los problemas principales de su «crepúsculo político», junto a otros como la precariedad, la desigualdad y la corrupción.

Herrera ha ironizado con la necesidad de que Podemos, en lugar de utilizar lemas de «grandes superficies» como El Corte Inglés, en alusión al de «va a llegar al fin la primavera».