Los sacrificios de cerdos y conejos impulsan la actividad de los mataderos
El aumento se atribuye sobre todo a una mayor demanda procedente de la industria alimentaria.
s. gallo | valladolid
La actividad en los mataderos de Castilla y León no cesa y el incremento de la demanda de carne se deja notar en el número de sacrificios, que en las 115 instalaciones de la Comunidad ha crecido en 14 millones en la última década hasta registrar el año pasado 79,1 millones de sacrificios, lo que supone un 21 por ciento más. Buena culpa de ello tienen los aumentos experimentados en el caso de los conejos (2,3 millones más), del porcino (2,2 millones más), y en especial de los solípedos, sobre todo los caballos, con un 206,6 por ciento (5.400 ejemplares más).
Según los datos correspondientes a la actividad inspectora en los mataderos de la Comunidad elaborados por la Junta de Castilla y León y recogidos por la Agencia Ical, el número de sacrificios el año pasado superó los 79,1 millones de animales. En su mayoría fueron aves de corral (60,7 millones), seguidos de lejos por los conejos (7,3 millones), el porcino (7,1 millones) y el ovino (3,2 millones de animales). El menor número de sacrificios fueron los animales bovino (426.393), seguido de los caprinos (129.165) y los solípedos (8.031).
En general todas las especies han experimentado un aumento en el número de sacrificios en la última década, salvo en el caso de animales bovinos, que cayó un 1,7 por ciento, y el de animales ovinos, que siguió esta tendencia en algo más de un 12 por ciento. Aunque en términos absolutos el aumento de los sacrificios de solípedos fue el menor de Castilla y León (pasó de algo más de 2.600 animales en 2009 a más de 8.000 el año pasado), fue el segmento animal que presentó un mayor crecimiento porcentual (206 por ciento).
El número de aves de corral sacrificadas aumentó en casi nueve millones y medio en estos diez años, hasta superar los 60 millones; el número de conejos creció en casi 2,4 millones, hasta superar los siete; y el porcino también tuvo una gran demanda y el número de sacrificios se elevó en más de 2,2 millones hasta superar los siete en total.