Las autonomías piden firmeza contra los aranceles y abrirse a nuevos mercados
Las comunidades autónomas han reclamado este lunes al Ministerio de Agricultura una posición de firmeza contra los aranceles que amenaza imponer a distintos productos agroalimentarios Estados Unidos y una posición común de la Unión Europea, que no acepte en ningún caso el intercambio de unos productos por otros.
El Ministerio ha reunido en Madrid a los consejeros del ramo de todas las autonomías, que han compartido su protesta por que el sector pague las consecuencias de una guerra comercial que les es ajena, puesto que su origen es el conflicto entre Estados Unidos y Europa por ayudas a la empresa aeronáutica Boeing. Los vinos, los quesos, el aceite, las olivas o los cítricos pueden verse afectados por esos aranceles y los consejeros confían en que se llegue a un acuerdo que los evite.
Así lo dijo el ministro en funciones de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, al término de la reunión de la Comisión Sectorial de Agricultura, que analizó las consecuencias para el sector agroalimentario español de los aranceles decretados por Washington, que en principio entrarán en vigor el próximo 18 de octubre. Planas se declaró «muy satisfecho» por la «unidad» que dijo que evidenciaron la Administración central y las autonómicas «para pedir firmeza» a Bruselas en la negociación con Estados Unidos.
REUNIÓN EN BRUSELAS MAÑANA
Esa posición de unidad la llevará Planas el miércoles a Bruselas a la reunión que mantendrá con los comisarios europeos de Agricultura y Comercio. Este martes recibirá representantes de los sectores afectdados.
El ministro explicó que España pedirá a la UE que, si finalmente no se logra un acuerdo ‘in extremis’ con Washington en la reunión de Ginebra del 14 de octubre, se pongan en marcha desde la Comisión Europea tres medidas que anunció el Ministerio de Agricultura el pasado viernes tras llamar a capítulo al embajador estadounidense para manifestarle el rechazo a los aranceles.
Las tres medidas son que Bruselas movilice recursos comunitarios previstos para crisis agrícolas, que cubra los costes financieros y de almacenamiento privado del aceite de oliva, y que active medidas de promoción en terceros países para los productos afectados.
Aparte de esas tres medias, Luis Planas recordó que la UE también tiene en la recámara la posibilidad de reclamar a Estados Unidos 4.000 millones de dólares por un pleito comercial que data de 2004 y que quedó en el cajón en su momento en aras a la resolución de conflictos por la vía del acuerdo.
El ministro aseguró que España y Francia tienen una posición muy próxima en este tema de los aranceles y así pudo constatarlo en conversación este pasado fin de semana con su homólogo galo. Sobre Alemania, admitió que este país tiene pendiente la renovación de acuerdos con Estados Unidos sobre coches «y eso está en el horizonte». Preguntado sobre el montante actualizado de las exportaciones españolas totales que a día de hoy estarían afectadas por los aranceles anunciados, Planas rebajó a 764,7 millones de euros los cerca de 1.000 millones que contabilizan la estadística de 2018 de la Secretaría de Estado de Comercio.
Desde Galicia, la consejera de Mar, Rosa Quintana, ha explicado que en su comunidad se pueden ver afectadas las ventas de unas 5.500 toneladas al año de conservas de pescado y marisco, por valor de unos 40 millones de euros con expectativas de crecimiento. El consejero de Desarrollo Rural, José González, ha añadido los problemas que puede tener el sector del vino gallego, que exporta un producto de calidad a Estados Unidos.
Lo «primordial», ha dicho el consejero, es la promoción en nuevos mercados, algo en lo que ha insistido también el consejero de Agricultura aragonés, Joaquín Olona, para quien es clave la promoción en otros países y acostumbrarse a «tener que prosperar con dificultades de este tipo».