La Comunidad se prepara para una nueva ley de transparencia
Toda la información publicada será reutilizable sin necesidad de autorización previa
El escudo de Castilla y León en una de las alfombras de la sede de la Junta.
La Consejería de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior ultima el texto del Anteproyecto de Ley de transparencia, acceso a la información pública y su reutilización de la Comunidad de Castilla y León en la que constará la denominada ‘cláusula Open Data’, que fijará como obligación para la Administración General de la Comunidad que todo desarrollo informático que realice —ya sea con medios propios o ajenos— facilite la extracción en formatos reutilizables de la información que se recopile, grabe o recoja.
La Dirección General de Transparencia y Buen Gobierno ha finalizado ya la redacción del anteproyecto de ley y en los próximos días será presentado y sometido a participación ciudadana en el Portal de Gobierno Abierto.
«Ampliar el ámbito de aplicación y las obligaciones de la legislación sobre transparencia son dos de las señas de este texto normativo, que se corresponde con uno de los grandes compromisos de legislatura presentados por el vicepresidente y consejero Francisco Igea, hace un semestre en las Cortes», explican desde la Junta.
El anteproyecto de ley cuenta con un título monográfico sobre la reutilización de la información pública. En varios artículos se especifica que se entenderá con carácter general que la información publicada será reutilizable sin necesidad de autorización previa, que se mostrará en el espacio específico de la web o sede electrónica de la entidad obligada por la ley o que la Administración publicará su información reutilizable en el Portal de Gobierno Abierto indicando el contenido de cada grupo de datos, estructura, licencias, formatos y frecuencia de actualización.
La información reutilizable deberá cumplir entre otras características, datos abiertos y procesables por defecto, únicos, compartidos, accesibles, georreferenciados y descritos semánticamente.
Es decir, las informaciones públicas se convertirán en datos con formatos estándar, de uso libre y abiertos —para su gestión y publicación—, no se duplicarán sino que se recogerán en un único repositorio, estarán disponibles para el conjunto de la organización y todas las personas, se facilitará la accesibilidad, cuando la información lo permita se indicará la posición o ámbito geográfico al que esté asociado el dato para conocer su localización sobre una representación cartográfica y explotar su carácter espacial