Los vecinos de Santovenia vuelven a frenar una nueva ‘okupación’
Una pareja entra en una casa que ha sido ocupada otras veces y huyen por la presión vecinal
Más de medio centenar de vecinos de Santovenia de Pisuerga (Valladolid) logra frenar en la noche del miércoles una nueva ocupación en la vivienda situada en el número 2 de la calle Fuentona.
Los hechos se produjeron sobre las 10 de la noche, cuando un vecino del edificio dio la voz de alarma al ver movimiento en el interior de la casa que, hasta hace unos días, había sido ocupada por una familia que había protagonizado varios altercados en el municipio.
En esta ocasión, según relatan fuentes del movimiento ‘Santovenia Unida’, era una pareja la que se encontraba en el interior. El efecto llamada logró reunir en las inmediaciones a más de 60 personas, «mucha gente joven», y los ánimos se empezaron a «caldear».
«La gente está muy cansada con todo lo que está pasando y hubo personas que arrancaron una de las persianas y rompieron una ventana para ver quiénes estaban en el interior», explican desde el movimiento.
Desde el primer momento, la plataforma avisó a la Guardia Civil, que se presentó en el lugar advirtiendo de que ellos no podía hacer nada. «Tuvieron que volver 20 minutos después porque los ánimos se estaban caldeando», relatan desde Santovenia Unida.
Fue entonces cuando, según explican desde el colectivo, uno de los agentes accedió al interior de la vivienda por la ventana rota y comprobó que ya no había nadie. «Se debieron de marchar por uno de los seis portales que tiene el edificio», explican las mismas fuentes.
La entrada de estos nuevos okupas se produjo por el garaje, ya que había una puerta forzada, según especulan desde la plataforma. «Aunque se había sellado con silicona, el marco estaba forzado», continúan.
Con ésta, es la tercera ocupación que el movimiento vecinal consigue frenar. En mayo fue en la calle Vado, posteriormente en Fuente Pioja y ahora en Fuentona.
La plataforma integrada por los vecinos de la localidad no entiende la «inacción» del propietario del edificio, una entidad bancaria, para poner los medios legales y evitar que se den estas situaciones. «Nos dijeron que iban a venir ayer, pero siguen sin aparecer», lamentan.
Desde Santovenia Unida advierten de que la población del municipio está «cansada» y el ambiente se está «calentando». «Después de lo que paso con los anteriores ‘inquilinos’ y todo el problema que estamos teniendo con la ocupación, a los vecinos se les está agotando la paciencia», concluyen.