De 16 comarcas, a seis grandes zonas en toda la comunidad

Otra de las duras críticas que ayer recibió el documento de actuación en las áreas periféricas de la comunidad fue la de haber obviado las conclusiones del estudio previo realizado por las universidades públicas de Castilla y León (León, Valladolid, Burgos y Salamanca), y que ya había sido encargado por la Junta de Castilla y León en el año 1999. Según Ángel Villalba, el estudio universitario identificaba y delimitaba la existencia de dieciséis comarcas periféricas, con características comunes en cuanto a población, densidad, situación agraria e industrial en el conjunto de la comunidad. Sin embargo, el Plan de Áreas Periféricas presentado recientemente por la Consejería de Economía y Hacienda, la leonesa Isabel Carrasco, ante el Consejo Económico y Social (CES), tan sólo se incluyen seis grandes áreas que, según Ángel Villalba, aglutinan zonas que nada tienen en común. Es el caso del área del Bierzo, en la que se incluye también la zona de La Cabrera, pero que «sólo tienen en común el ser limítrofes». En general, las áreas periféricas que recoge el documento elaborado por la Consejería de Economía y Hacienda son la suma de las diferentes comarcas propuestas por las universidades y la acumulación artificial de poblaciones y densidades diferentes, según denunció ayer Villalba en rueda de prensa en Valladolid: «Se agrupan de forma grosera y absurda la propuesta de las universidades, acumulando extensión, población y densidad», con «un nulo respeto de la junta hacia estudios profundos, serios y objetivos». El líder socialista espera que el CES «le saque los colores» en su informe sobre el programa.