Los últimos incendios acaban con las previsiones de una buena campaña

En las tareas de extinción del fuego en los Arribes del Duero participaron una avioneta de carga en tierra, un avión Hércules, un avión anfibio, un avión de coordinación, dos cuadrillas, dos retenes de maquinaria, las cuadrillas de acción rápida de Vitigudino y Villardeciervos, tres autobombas, un técnico y dos agentes forestales. También esta misma mañana fueron extinguidos los fuegos registrados en las localidades de Cubo de Benavente, considerado como intencionado, y en Villar del Buey, también dentro del Parque Natural de Los Arribes del Duero, en territorio zamorano, que afectaron a superficie de pastos y matorral respectivamente. Por el contrario, ayer continuaba activo el incendio originado en la localidad de Escober de Tábara, en las proximidades de la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra, que se inició a las 12.50 horas, según el último parte de incendios facilitado por el Servicio Territorial de Medio Ambiente en Zamora. En las labores de extinción trabajan dos agentes forestales, una autobomba, dos cuadrillas y la cuadrilla de acción rápida del centro forestal de Villardeciervos. 150 hectáreas en Béjar El incendio que comenzó el pasado domingo en el término municipal de Fuentes de Béjar, y que ha tenido algunas reproducciones en los últimos días, ya se encuentra controlado, aunque ha resultado uno de los más catastróficos del verano, con un total de 150 hectáreas arrasadas por el fuego, 130 de matorral y pasto, y 20 de dehesa y monte abierto. Según publicó La Gaceta de Salamanca, el Ayuntamiento bejarano solicita ayuda a las instituciones para paliar los desastres de las llamas, que en los tres últimos fuegos se han carbonizado las tres cuartas partes del término municipal. El municipio aún no ha calculado las pérdidas económicas tras el último incidente, pero se asegura que han sido millonarias, ya que el fuego ha terminado con la mayor parte de los pastos del municipio, con otras extensiones de encinas y fresnos. Además, se han empleado grandes cantidades de agua paa apagar el incendio, y se tienen que reparar los cercados dañados durante el siniestro.