La Junta plantea almacenar patatas para forzar una subida de precios

La Junta de Castilla y León ha propuesto al Ministerio de Agricultura el almacenamiento en esta comunidad de 100.000 toneladas de patatas, con una ayuda a los productores de un céntimo por kilogramo y mes de inmovilización, con el fin de evitar la acumulación de la oferta y, por lo tanto la caída en picado de los precios. Esta información fue facilitada ayer por la Junta en una reunión del Consejo Regional Agrario presidida por el consejero de Agricultura, José Valín. Las organizaciones profesionales agrarias denuncian que de los 30 o 40 céntimos que pagan los consumidores por cada kilogramo de patatas los productores perciben entre cinco y siete céntimos. Esto significa que los intermediarios obtienen entre 25 y 33 céntimos por kilo, casi un 80% del precio de venta al público, lo que a su juicio no sólo va contra los intereses de los productores, sino también de los consumidores. El Consejo acordó, a propuesta de Asaja, la creación de una mesa autonómica de estudio de mercado y de producción que permita un mejor control de la siembra en Castilla y León, así como la búsqueda de factores complementarios entre las cooperativas de patata de siembra y las de patata de consumo, con el fin de que el sector dependa cada vez menos de la semilla extranjera y ahorrar así costes de siembra.