La sequía amenaza la producción prevista de uva
La pertinaz sequía que desde el pasado invierno padece Castilla y León puede recortar ligeramente la producción de uva prevista para esta vendimia, hasta el punto de situarla en los indicadores de 1999, cuando se recogieron 163,7 millones de kilos, y de 2000, con 190,5 kilos. Estas estimaciones ha realizado la organización profesional agraria Unión de Campesinos de Castilla y León-Coag, en una nota informativa, a pesar de que este año han entrado en producción nuevas plantaciones y los daños de heladas y granizo han afectado a zonas muy concretas. La sequía ha reducido las reservas de agua en el suelo, por lo que la cepa no puede mantener el tamaño y el peso de la uva en unos márgenes normales. No obstante, Coag considera que esta situación no debe afectar al precio final de la uva hasta el punto de asumir precios por debajo de los costes de producción, «más aún cuando en estos momentos no se puede asegurar las producciones finales de una parcela o zona vitícola». Por ello, esta organización propone a la administración la creación de foros de discusión para fijar precios y calidades «sin que se produzcan especulaciones y se fomenten los contratos de suministro de uva a medio y largo plazo».