La Junta muestra su «rechazo total» a la propuesta de reforma de la Comisión Europea en la política agraria
La nueva PAC hará perder cincuenta millones de euros a la comunidad
El director general del Fondo de Garantía Agraria de la Junta de Castilla y León, Eduardo Cabanillas, adelantó ayer las primeras cifras a
Un tractor trabaja en los campos que rodean al castillo de Peñafiel, en la provincia de Valladolid
En este sentido, Cabanillas, que trasladó el «rechazo total» que en estos momentos presenta la Junta hacia la propuesta del comisario Fischler, indicó que en progresión aritmética y hasta el año 2010 el recorte de las ayudas que reciben los productores de la comunidad autónoma debido a los efectos de la modulación supondría cerca de 80 millones de euroa, una cifra que calificó de «muy considerable». Según explicó el director general del Fondo de Garantía Agraria, la posición de la Junta es común a la del Gobierno central, aunque, insistió, ambos trabajan sobre un documento no legislativo que todavía hay que analizar y debatir primero en el ámbito nacional y posteriormente en el europeo. Cabanillas concretó la postura del Gobierno de Juan Vicente Herrera resaltando el desacuerdo de la Junta con los planteamientos europeos que establecen una rebaja considerable en los precios de intervención del cereal, iniciativa que podría resultar muy perjudicial para comunidades autónomas como Castilla y León, donde, recordó, este producto es «fundamental». «Lo que hemos visto es que esas bajadas no se compensan con nada», insistió Cabanillas, quien también se mostró completamente en contra de las modificaciones propuestas para el sector de forrajes de secados que supondría, según explicó, una «paralización» y un «riesgo» de todas las empresas transformadoras que se han creado en las regiones de Castilla y de León y un «freno rotundo» a un sector «alternativo en la agricultura de la comunidad». Por otra parte, Cabanillas consideró «muy peligroso» el desacoplamiento de las ayudas reflejado en la propuesta de la Comisión Europea, pues, señaló, incentiva el abandono de la actividad agraria. «Nos oponemos a un sistema que no garantiza el mantenimiento de la actividad en las zonas rurales», indicó el director general del Fondo de Garantía Agraria, quien también calificó de «excesiva» una modulación que la Junta «no está dispuesta a permitir» siempre que suponga una rebaja del veinte por ciento en las ayudas a los productores de Castilla y León. La reforma de la PAC podría acelerar ya el desmantelamiento del sector primario en el mundo rural, lo que podría perjudicar al medio ambiente.