Agricultura propone el cierre de las azucareras de Monzón y Benavente

La salida a la luz del documento de reestructuración ha sido la bomba que convierte en oficioso lo que todo el mundo sabía, que las azucareras de Benavente y Monzón tenían los días contados desde el año pasado. El secretario general de la en UPA Castilla y León, Julio López, aseguró que el Ministerio de Agricultura ha elaborado recientemente este documento, que está «muy caliente», que, según sus datos, ha remitido a las empresas Azucarera Ebro, ARJ (Azucareras Reunidas de Jaén) y ACOR con estas y otras medidas. López considera que la Junta tiene constancia de la existencia de este escrito. Por su parte, el presidente de la Unión Sectorial Remolachera de la organización agraria, Domiciano Pastor, explicó que lo que se trata de hacer con las medidas propuestas por el ministerio es arreglar la Orden Ministerial de octubre de 1998 por la que Azucarera Ebro tenía que ceder 30.000 toneladas de cuota, las cuales ahora el Ministerio propone que se repartan entre ARJ (20.000 de azúcar, 150.000 de remolacha) en la zona sur y ACOR (10.000 de azúcar, 75.000 de remolacha) en la zona norte. Polémico reparto de cuota Dentro de este cupo de 30.000 toneladas de azúcar se encuentran las 8.375 de azúcar de caña, que también se llevan al sur. Pastor explicó que esta cuota no la adjudicó la UE, sino que se quitó a las zonas productoras y remolacheras de forma proporcional, por lo que piden que se devuelva a la zona norte lo que les corresponde de esa cantidad, es decir, un 66 por ciento. Ante estas propuestas, desde la UPA consideran que se ha «toreado» a los productores y se produce un agravio entre los del norte y los del sur, saliendo más perjudicados los primeros. Los representantes de la organización agraria aseguraron que es «descabellado» y hasta «escandaloso» que el Ministerio proponga el cierre de azucareras cuando está obligado a velar principalmente por los intereses de los productores y por parte de los cooperativistas de ACOR «no se ha dicho nada». Además, en el documento se fija la fecha de 28 de febrero de 2003 para cerrar el acuerdo de la reestructuración y las fábricas cerrarían en la campaña siguiente, afirmó López. El secretario de UPA considera que lo que el Ministerio hace es incitar a cerrar una fábrica de una cooperativa y pretenden «vender» la cuota que tiene, que pasaría del norte al sur, sin ninguna posibilidad de aumentar la cuota cuando todos los años hay excedentes, unas 500.000 toneladas de remolacha este año. En esta línea, afirmaron que los productores, ante este reparto de las cuotas, «algo tendrán que decir». Así, desde la UPA afirmaron que la Junta de Castilla y León ha «engañado a todos los cultivadores, agricultores y a la sociedad en general». López afirmó que no se puede tener constancia de si la Administración autonómica tiene o no conocimiento del documento, pero asegura no poder creer que no lo tienen «aunque lo juren». A espaldas de los agricultores También las tres empresas tienen conocimiento de estas propuestas que figuran en el documento, redactado por el subsecretario de Agricultura, Manuel Lamela, «a espaldas de las organizaciones agrarias». En lo que se refiere a la propuesta de cierre para la molturadora de ACOR en Valladolid, López cree que puede ser una justificación para cerrar otras y que lo que el Ministerio ha hecho con Ebro es dar más componente político que criterios socioeconómicos. En la fábrica de Monzón trabajan en campaña unos 300 agricultores y otras 80 personas fijas y en el caso de Benavente otros tantos productores en campaña y unas 85 permanentes.