«Si me condenan sería tanto como una manera de legitimar al FRAP»
El fiscal pide absolver a Cayetana Álvarez de Toledo de dañar el honor del padre de Iglesias
La Fiscalía de Zamora pidió ayer la desestimación de la demanda de Francisco Javier Iglesias contra la diputada Cayetana Alvarez de Toledo, en el proceso abierto por la demanda del padre del exlíder de Podemos y exvicepresidente del Gobierno contra la política del Partido Popular por atentar contra su honor.
La propia acusada confirmó este hecho tras el juicio celebrado a puerta cerrada en el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Zamora, la ciudad donde reside el demandante.
El caso se remontan a mayo de 2020, cuando Alvarez de Toledo se refirió a Pablo Iglesias, entonces vicepresidente segundo del Gobierno, como «hijo de un terrorista». La que en ese momento era portavoz del PP en el Congreso realizó esta afirmación en sede parlamentaria y la repitió más tarde en unas declaraciones concedidas al diario ABC.
En junio de ese mismo año, el aludido, Francisco Javier Iglesias, confirmó su intención de demandar a la responsable política, a la que pide una indemnización de 18.000 euros.
Tras el juicio celebrado de forma presencial en Zamora, Iglesias y su letrada rehusaron hacer declaraciones ante los medios, mientras que Álvarez de Toledo se situó ante los micrófonos para asegurar que acudió a la sede judicial con el objetivo de «declarar que la Tierra es redonda».
A juicio de la política del PP, tan evidente resulta ese dato como decir que «una persona que militó en una organización terrorista puede ser calificada como terrorista sin que se atente contra el honor de nadie».
Álvarez de Toledo volvió a repetir que «el Frap es una organización terrorista» y ha enumerado algunas de las ocasiones en las que tanto el demandante como su hijo, Pablo Iglesias, han reconocido la pertenencia de Francisco Javier a este grupo.
La parlamentaria citó un artículo de Pablo Iglesias por la muerte de Santiago Carrillo, algún mensaje en redes sociales y una entrevista concedida por el demandante al diario Público en 2020: «Dijo que perteneció al comité para la creación del Frap», advirtió la diputada.
A partir de ahí, y tras elogiar la argumentación de su defensa, Álvarez de Toledo expresó su estupor por la estrategia utilizada por la acusación: «Han hecho algo sorprendente, como decir que eso eran bromas familiares, o algo más extravagante aún, como señalar que la entrevista de Público contenía errores que él no ha corregido más tarde», ha deslizado la acusada.
Con esas palabras en sede judicial como telón de fondo, Álvarez de Toledo remarcó que, si ella llega a ser condenada, sería «una manera de legitimar al Frap», a cuyas víctimas ha recordado apoyada por un libro de Carmen Ladrón de Guevara sobre las víctimas del terrorismo de extrema izquierda: «Es incompatible el orgullo frapero con el honor vulnerado», zanjó la acusada, con la esperanza de que el caso se archive.