La UE inyecta 591,8 M€ para hacer una CyL más verde, digital y social
Carriedo destaca el impacto de los fondos Feder para el crecimiento de la Comunidad
Carlos Fernández Carriedo presenta el programa Feder de Castilla y León, ayer. MIRIAM CHACÓN
Hacer de Castilla y León una autonomía más digital, sostenible y social son los tres objetivos principales de los Fondos Europeos de Desarrollo Rural (Feder) para el periodo que finaliza en 2027, que tiene una asignación de 591,8 millones de euros para la Comunidad.
Así se lo ha trasladó ayer el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, a representantes de empresas, cámaras de comercio, agentes económicos y sociales, universidades y entidades locales en un acto en Valladolid, donde explicó los aspectos principales de este fondo y los objetivos marcados.
Entre las prioridades de estos fondos europeos para el desarrollo está la transición digital e inteligente, que cuenta con una dotación de inversión de 262 millones de euros, la más cuantiosa, «dirigidos a conseguir una Castilla y León más competitiva e inteligente», explicó el consejero a los medios de información.
La segunda prioridad se centra en lograr una Comunidad más verde, con una previsión de 242 millones de euros de inversión que tiene como objetivo la mejora de la eficiencia y el ahorro energético en edificios públicos, así como la implantación de redes públicas de distribución de energía térmica, la prevención de riesgos y extinción de incendios forestales, entre otras.
La tercera prioridad se dirige a lograr una Comunidad más social e integradora, con 88 millones de euros, que aglutina dos objetivos fundamentales que abarcan la transformación social y el impulso a la cultura y el turismo.
De los casi 600 millones de euros del fondo, 236,7 millones de euros —el 40 %—, son aportados por la Administración autonómica y 355,1 millones, el 60 %, proceden de la Unión Europea.
La UE establece una financiación del 60 % al estar Castilla y León en el grupo de ‘regiones en transición’ junto con Galicia, Valencia, Cantabria, Asturias y La Rioja, entre otras, con un PIB per cápita entre el 75 % y el 100 % de la media de la UE.
Las regiones menos desarrolladas (Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha), por debajo del 75 % del PIB per cápita, y las ultraperiféricas cuentan con una financiación del 85 %, y la financiación es del 40 % para las regiones más desarrolladas (Madrid, País Vasco y Cataluña, entre otras).
Finalmente, preguntado por la eficacia de estos fondos a lo largo de los años, el responsable de los fondos Feder en la Comunidad, Vicente Rodríguez, aseguró que sin ellos, Castilla y León sería hoy una Comunidad con una «mayor divergencia» en relación a otras regiones más desarrolladas de Europa, por lo que estos han ayudado a cohesionar la autonomía en todo este tiempo, apostilló.