Barcones descarta el bullying en el intento de suicidio del menor burgalés que aún vive
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, aseguró ayer que la investigación policial abierta descarta bullying en el intento de suicidio del menor burgalés de 17 años que ayer se precipitó desde el décimo piso de un bloque de la avenida Reyes Católicos de la capital. Pese a las informaciones contradictorias, que apuntaban a que el joven había fallecido, señaló que el joven sigue con vida aunque está en estado «muy muy grave», ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital. Con motivo de la presentación del dispositivo previsto para la jornada de votación de las elecciones locales del próximo domingo, Barcones reiteró, según recogió la Agencia Ical, que la Policía Nacional descarta que el intento autolítico esté relacionado con el acoso escolar, por lo que la investigación se centra ahora en averiguar si pudo ser un accidente, aunque todo parece indicar que se trató de un suicidio.
Emergencias recibió una llamada alertando de lo ocurrido en torno a las 19.30 horas y enviaron al lugar a los Bomberos de Burgos con un camión autoescala, tres ambulancias, la Policía Nacional y dos dotaciones de Policía Local. Al parecer, el joven, que se precipitó por un patio estrecho del edificio, pudo salvar la vida al chocar en su caída con varios elementos que le frenaron antes de caer a un tejadillo de la zona inferior del inmueble, según fuentes policiales.
Cuando los bomberos lograron rescatar al joven con un vehículo autoescala, una ambulancia le trasladó al Hospital Universitario de Burgos, donde ingresó con pronóstico reservado y en cuya UCI continúa. El joven cayó a un patio interior, de difícil accesibilidad, por lo que los Bomberos tuvieron que rescatar al menor para su traslado posterior al hospital en una UVI móvil.