Castilla y León recibe 10,2 millones de la primera línea transversal del Perte de Economía Circular

Castilla y León recibió hasta ahora 10,2 millones de la primera línea transversal del Perte de Economía Circular, de un total de 165 millones que el comisionado creado para este tipo de políticas por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico convocó mediante subvenciones para todo el territorio nacional. A día de hoy se encuentra abierta una nueva línea para el sector textil, hasta mediados de junio, y próximamente se dará paso a la de plásticos y la línea para bienes de equipo de energías renovables.

Así lo trasladó el comisionado de Economía Circular, Alejandro Dorado, quien participó en la sede de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio en una jornada sobre este tipo de políticas, organizada por el Club de Excelencia en Sostenibilidad, con la ayuda del Miteco, y en el que colaboró la Junta. 

El titular de la cartera y hoy anfitrión, Juan Carlos Suárez-Quiñonez, destacó la aportación autonómica a un “tema capital, esencial”, sobre el que “todavía cuesta poner en marcha, que es la economía circular”. “En definitiva es cambiar el sistema actual de la economía lineal, de utilizar energías vírgenes, principalmente no renovables en exceso, y hacer un abuso de los recursos naturales”, comentó.

Durante su intervención, expuso que los recursos naturales son “cada vez más escasos y más complejos de obtener” y afeó que “en muchas ocasiones, a causa de la geopolítica y los conflictos bélicos, estas materias dependen de países gamberros que hace inviable para las empresas su consecución a precios razonables y afecta a la competitividad económica y la competitividad de la sociedad”.

Por ello, defendió que la economía circular “trata de instalar nuevas formas de generar envases bioecológicos” y otorgarles una “segunda vida”. Todo ello, prosiguió, “afecta” a todos, desde las administraciones a las empresas y los particulares. Para ello, recordó que la Junta cuenta desde 2021 con una Estrategia de Economía Circular 2021-2030, una “hoja de ruta que marca cómo lo privado y lo público tienen que trabajar para la economía circular”. De hecho, presumió de que ha la Comunidad ha sido seleccionada por la Comisión Europea como una de las 12 iniciativas del viejo continente donde quieren implantar experiencias pilotos para acelerar la economía circular.

El consejero explicó que su departamento ha trasladado la economía circular “a todo tipo de ámbitos”, como el I+D+i, con líneas de ayuda a través del Instituto de Competencia Empresarial y de la Consejería de Educación, así como mediante los distintos clústeres de los sectores clave de la economía autonómica, como es el sector de la madera, la agroindustria, la construcción, la alimentación, la aeronáutica y el transporte. También, resaltó, “se ha fomentando la bioeconomía y el uso de productos madereros y no madereros locales para sustituir otros que se obtienen de combustibles y de energías no renovables”. “Castilla León es una avanzada en estos deberes”, sentenció Suárez-Quiñones.

Mejores prácticas

Por su parte, el secretario del Club de Excelencia en Sostenibilidad, Juan Alfaro, subrayó que este tipo de jornadas permiten debatir con las empresas y las instituciones y conocer las mejores prácticas en economía circular que tiene el tejido empresarial español y, en este caso, el de Castilla y León.

Por esa razón, hoy en Valladolid se dio cita una representación de grandes, pequeñas y medianas empresas, así como startups que son “muy innovadoras” en esta materia. 

Alfaro destacó que para las compañías es “importante” conocer también las prácticas públicas que se están poniendo en marcha, tanto por parte del Ministerio como de la Junta, que “está haciendo las cosas muy bien”. También mencionó la política al respecto del Ayuntamiento de Valladolid, que estuvo representado en la jornada.

“Creemos que ya no hay marcha atrás, que la situación que sufren vertederos en todo el país es una situación de cierta insostenibilidad. Estamos optando porque las compañías intenten que los productos, servicios y soluciones que ponen en el mercado puedan tener un segundo uso y al final de su ciclo de vida no sean considerados como residuos, sino como subproductos que sean susceptibles de incorporarse en algún otro nuevo producto que haya”, resumió Alfaro.

Por otra parte, citó el impacto de la economía circular sobre el mercado laboral, aspecto en el que, dijo, Castilla y León es una “región generadora de empleo de calidad”. “Vemos cómo cada día más se van incorporando empleos verdes, y yo creo que esto revoluciona, en cierta medida, estas variables de las que hablamos siempre en temas de sostenibilidad”, sostuvo Alfaro.

Desterrar la economía lineal

Por último, el comisionado para la Economía Circular, Alejandro Dorado, apeló a la sociedad a “desterrar la economía lineal que produce grandes impactos ambientales”, esa que consta de “extraer, producir, consumir y tirar”, y que “afecta tanto al cambio climático como a la crisis de biodiversidad o, especialmente, a la contaminación”. “Las señales están ahí, tenemos que ir hacia la circularidad”, apuntó, para destacar que con este tipo de jornadas se ponen en común buenas prácticas y las herramientas “están a disposición desde las administraciones públicas para acompañar a las empresas en este trayecto”.

“Somos conscientes de que supone un esfuerzo”, admitió Dorado, quien por ese motivo recordó que el Gobierno de España implantó una estrategia en este marco en 2020, “pionera”, con planes de acción para la economía circular. Ello implicó a la legislación, como por ejemplo la Ley de Residuos para la Economía Circular, pero “especialmente el PERTE, una serie de subvenciones de ayudas puestas a disposición para el sector privado”, que suponen en torno a 500 millones de euros para sectores “receptivos a la hora de reducir esos impactos ambientales que tienen una importancia en la generación de riqueza y también una implantación territorial importante”.

En este sentido, ejemplificó, el sector textil, el de los plásticos o el de las energías renovables “tienen mucho potencial de circularidad”, razón por las que se dirigen hacia ellos estas ayudas, que suman 100 millones de euros para cada sector, más otros 200 para el conjunto de la economía.

En este sentido, Dorado recordó que empresas de Castilla y León han sido beneficiadas de estas ayudas en la convocatoria que acabamos de cerrar, por valor de 10,2 millones del total de 165,5. “Lo que pretendemos es que el conjunto del tejido empresarial de Castilla y León sea consciente de estas oportunidades, de la necesidad ambiental de transitar hacia la economía circular, de la competitividad que le proporciona esa necesaria circularidad y de las oportunidades de creación de empleo”, espetó el comisionado, quien también mencionó la posibilidad de “desvincular materias que vienen de algunas latitudes que no son tan fiables”. En este sentido, “tener esos materiales en el propio territorio otorga seguridad a esa cadena de producción”.