Tudanca propone un truque: apoyar a Mañueco si el PP apoya a Sánchez

A cinco días de que el pleno de las Cortes de Castilla y León debata y vote la propuesta de techo de gasto de la Junta para 2025, la incertidumbre en torno al resultado se mantiene tras las primeras reuniones del consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo (PP), con representantes de partidos de la oposición. Cuando parecía que el techo de gasto estaba condenado al rechazo, en la jornada de ayer tanto el portavoz del PSOE, Luis Tudanca, como el procurador del Grupo Mixto y exvicepresidente de la Junta, Francisco Igea, abrieron la puerta a una abstención que, en el caso de los socialistas, permitiría al PP sacar adelante la votación del miércoles en solitario y pese al anunciado voto contrario de Vox.

Tras la reunión entre Carriedo y Tudanca no hay acuerdo sobre las condiciones planteadas por el PSOE para garantizar su abstención, pero tampoco está claro si los procuradores socialistas optarán o no por la abstención, pese a no conseguir la principal contraprestación demandada al PP —que los 18 diputados del PP de Castilla y León respalden la propuesta de senda de estabilidad del Gobierno en el Congreso de los Diputados—, ya que seguir con la tramitación presupuestaria ampliaría el tiempo para buscar acuerdos.

De hecho, en la rueda de prensa posterior a la reunión, Tudanca aseguró que ve «más cerca» un acuerdo con el PP en esta materia: «Nos planteamos seriamente la abstención», resumió sobre la votación del miércoles, pese a reconocer que está «difícil» que los populares hagan algún gesto en el Congreso y en los ayuntamientos de León y Palencia, en reciprocidad al voto del techo de gasto.

Entre las propuestas planteadas por el PSOE en una hipotética negociación presupuestaria, Tudanca citó además la recuperación del diálogo social, una política de vivienda «ambiciosa», el «fortalecimiento de la sanidad pública» con la reducción de listas de espera y la recuperación del Hospital de Burgos, la gratuidad de libros de texto y material escolar, una ley de reto demográfico con garantía de prestación de servicios, una política fiscal diferente sin «regalos fiscales a los ricos», un plan de lucha contra la pobreza y el incremento de inversiones provinciales atrasadas.

«Sería un gran servicio a Castilla y León y a España», resumió Tudanca.

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo reclamó al PSOE retirar sus «condiciones previas», que ve ajenas a Castilla y León, para poder llegar a un acuerdo sobre el techo de gasto y poder «avanzar en otros temas» en las partidas presupuestarias concretas.

Carriedo afirmó que, tras las primeras reuniones, sigue «viendo difícil» que prospere el trámite presupuestario, por los requisitos planteados por el PSOE y por la ausencia de Vox en esta ronda de contactos.

El consejero descartó mediar ante el PP para que puedan plantearse apoyar esa senda de estabilidad y también negó que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, como presidente del PP-CyL, vaya a realizar gestión alguna en ese sentido, al afirmar que sólo responde a intereses del Gobierno autonómico.

También ha rechazado influir en los grupos municipales del PP en León y Palencia para que puedan llegar a acuerdos con el PSOE para sacar adelante las cuentas, ya que entiende que debe regir la autonomía municipal para llegar a ese tipo de pactos, aunque ha ofrecido a los alcaldes de esos ayuntamientos —los socialistas José Antonio Diez y Miriam Andrés— que sigan la misma ‘hoja de ruta’ que la Junta al reunirse con los grupos municipales de la oposición.

Vox habla de «trileros»

El exvicepresidente y actual portavoz de Vox, Juan García-Gallardo, defendió su ausencia en esta reunión y comparó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, al consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, al portavoz socialista, Luis Tudanca, y al exvicepresidente Francisco Igea con «unos trileros» en la negociación presupuestaria.

A través de la red social X, García-Gallardo publicó una imagen retocada de un cuadro en el que los rostros de Mañueco, Carriedo, Tudanca e Igea aparecen colocados en las cabezas de algunos de los personajes en torno a una mesa, jugando con unos vasos y unas bolas.

«Quieren discutir sobre cuestiones accesorias, para no tocar nada de lo esencial, en lo que todos ellos están de acuerdo: inmigración masiva, Agenda 2030, privilegios sindicales, aborto, memoria histórica», ha escrito García-Gallardo, quien concluye su mensaje zanjando: «Son unos trileros. Y no vamos a participar en su juego».

El portavoz de Soria Ya, Ángel Ceña, mantuvo que el voto de este partido ante el techo de gasto que será debatido el miércoles es un no por el momento, aunque ha dejado la puerta abierta a votar a favor o abstenerse para facilitar la tramitación presupuestaria si la Junta acepta cuatro inversiones concretas para 2025, entre ellas un helicóptero medicalizado de emergencias en la provincia de Soria y una segunda UVI móvil medicalizada.

El exvicepresidente de la Junta y procurador del Grupo Mixto, Francisco Igea, ha afirmado que con la posibilidad de que el techo de gasto presentado por el Gobierno autonómico sea aprobado, a través al menos de la abstención de alguno de los grupos de la oposición, «se abre una oportunidad» para «hacer política de verdad».

«Creo que esta es una oportunidad para todos y espero que el próximo miércoles se apruebe el techo de gasto, no porque sea bueno o malo el techo de gasto, sino porque esto no se abre la posibilidad de hacer política de verdad», ha resumido, abierto incluso a votar a favor de su aprobación si fuera necesario para iniciar la negociación de enmiendas en un debate presupuestario que ve «esencial».