La niña abandonada en un club regresa con su familia

La Gerencia Territorial de Servicios Sociales de Burgos devolvió ayer al domicilio familiar a la niña de 20 meses que fue abandonada por su padre en el club «Las Palmeras» de Pancorbo el pasado 10 de febrero tras haber «constatado que no ha existido maltrato hacia la menor», según indicó el gerente José María Arribas. La decisión fue adoptada el pasado miércoles 19 por la Comisión de Evaluación que también acordó dejar el expediente abierto para la puesta en marcha de un Plan de Intervención Familiar que garantice que la menor no se encuentra desatendida en ningún aspecto básico. Dicho programa se desarrollará «por el tiempo que sea necesario, hasta que la familia desarrolle con autonomía la custodia de la niña», explicó Arribas. Uno de los aspectos que ha sido determinante para devolver a la niña a su domicilio familiar en Miranda de Ebro, además de no haberse detectado malos tratos, ha sido que los padres siempre mostraron su «voluntad de que se reintegrase a la menor». El abandono se produjo en el club de alterne «Las Palmeras» de Pancorbo sobre las 22 horas del día 10, cuando J. L. P. G., de 51 años de edad, llegó al local con síntomas de nerviosismo en compañía de su hija. El dueño del club entregó a la menor a la Guardia Civil, pasando a un Centro de Acogida de Burgos donde permaneció hasta ayer.