Un marroquí mata a una trabajadora social y hiere a un taxista en Zamora

El subdelegado del Gobierno en Zamora, Óscar Reguera, relató que pasadas las ocho de la mañana de ayer la Policía Municipal recibió dos llamadas en las que se informaba de un accidente de tráfico en la avenida del Mengue de la capital. Varios agentes se trasladaron al lugar de los hechos y se encontraron con un súbdito marroquí al volante de un taxi, tras lo que confesó que había robado el vehículo y que había acuchillado al taxista en el cuello. Entretanto, el taxista acudió en torno a las ocho y diez de la mañana, taponándose las heridas con un dedo, a las dependencias del Servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Zamora, situado en el Bosque de Valorio, para pedir auxilio. Acto seguido fue trasladado en una furgoneta al hospital Virgen de la Concha de la capital. Al parecer el joven marroquí cogió el taxi en la plaza Mayor y pidió a taxista que lo trasladara al Bosque de Valorio, lugar donde le agredió y le robó el taxi para emprender la huida. Paralelamente, la residencia de Mensajeros de la Paz notificó que habían echado de menos a una de sus educadoras, por lo que la Policía Nacional relacionó ambos hechos y en torno a las dos de la tarde fue encontrado el cuerpo sin vida de la trabajadora social. El cuerpo se halló en un cuarto semisótano del propio centro de la ONG, tapado con una colcha y varios cartones con indicios de estrangulamiento. El último parte disponible sobre el estado del taxista determinó que éste presentaba una herida por arma blanca punzante en la región cérvico-lateral derecha, de tres a cuatro centímetros de profundidad y descendente, que afecta al paquete muscular del esternocleidomastoideo, sin que se observen lesiones neurológicas y vasculares. Su pronóstico es grave y se espera que permanezca ingresado durante los próximos días. Óscar Reguera aseguró que ha habido suerte, ya que la herida estaba cerca de la carótida y la yugular. El subdelegado del Gobierno añadió que el presunto autor de los hechos estuvo acogido en el centro de Mensajeros de la Paz de Zamora hasta que en septiembre del pasado año lo abandonó por motivos que se desconocen. Asimismo, añadió que su permiso de residencia había caducado el cinco de febrero y que se sabe que residía en Salamanca desde hacía unos meses. Finalmente, Reguera apuntó que la investigación tratará de determinar cómo el joven marroquí accedió a la residencia, aunque en el cacheo se le encontró una llave que corresponde a las instalaciones. La hipótesis que se baraja es que actuó sólo en todo momento.