La Junta destina un millón para cuidar el medio natural

En concreto, la Junta de Castilla y León ha estimado necesario destinar un total de 541.543,28 euros para la contratación de una cualificada asistencia técnica para apoyar la aplicación del Plan de Recuperación del oso pardo Cantábrico. Para esto se requiere poner en marcha el desarrollo de una serie de actuaciones como son el establecimiento de un servicio de seguimiento, la formación de agentes y celadores medioambientales, al sensibilización de colectivos sociales y de la población escolar en zonas oseras así como la elaboración de informes técnicos en relación con sucesos relevantes ecoetológicos, finalizando con la elaboración de un informe basado en la información obtenida durante el seguimiento, en el que se analice el uso del hábitat, evolución demográfica y distribución de la especie en la comunidad de Castilla y León. La Junta de Castilla y León recuerda en este sentido que el oso pardo -«Ursus arctos»- ha sufrido una «fuerte regresión poblacional y de sus áreas de campeo» en los últimos siglos, en los que la caza furtiva, la fragmentación de sus grupos de población y la pérdida de hábitats han sido «factores determinantes y conducentes» a la clasificación del oso pardo como «especie en peligro de extinción», dentro del Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. En todo el territorio español se calcula la presencia de entre 80 y 100 espécimenes de oso pardo cantábrico, de los se estima que entre 25 y 30 forman parte de la población que habita las zonas oseras de Castilla y León. La Junta de Castilla y León, en junio de 1990 aprobó el citado Plan de Recuperación con el interés de dinamizar diversas actuaciones encaminadas a la conservación de esta especie tan emblemática. Por otro lado, se destinarán 417.600 euros para efectuar diversos tratamientos de defoliadores de masas forestales, enmarcadas dentro del Plan Forestal.