Son como niños

Tenía razón el procurador de la UPL Joaquín Otero cuando se refirió a populares y socialistas como niños durante el pasado pleno de las Cortes de Castilla y León. Otero, quien contemplaba desde su escaño cómo PP y PSOE se tiraban los trastos a la cabeza por la crisis de Irak, la matanza de vacas en La Cabrera y no se sabe cuántas guerras más, se mostró sorprendido por tanta infantil actitud y recordó que para niño ya estaba Álvarez Cascos y sus maquetas de trenecitos, recientemente presentadas en la capital leonesa. Pero si infantil es el comportamiento de populares y socialistas cuando determinadas cuestiones salen a relucir en el hemiciclo, la actuación de los procuradores de la Unión del Pueblo Leonés es cuando menos incomprendida. Casi nadie entendió el pasado miércoles que Otero se pusiera un casco de motorista en mitad del pleno para defender el circuito de velocidad de La Bañeza. Si bien los socialistas obviaron esta escena durante su participación en el debate, el PP, encabezado por el consejero de Educación y Cultura, Tomás Villanueva, no pudo ser más duro con el atrevimiento de los leonesistas, a los que criticó por estar haciendo el ridículo y faltando al respeto a las instituciones.