«Mi proyecto con esta tierra era estar cuatro años»
-¿Hay algo de cierto en las malas lenguas que hablan de que se marcha por razones políticas?
-Yo creo que no. Sinceramente, no hay ninguna razón oculta. Yo acepté un compromiso con esta tierra por un periodo de cuatro años, el mismo que dura mi excedencia en la Unión Europea. Mi proyecto era estar cuatro años y creo que los he vivido intensamente. -¿Entonces por qué se habla tanto sobre su marcha? -No suele ser habitual que una persona venga a la actividad política, a un Gobierno, y luego se vaya porque su vida no es la política, como es mi caso. Lo que es verdad es que yo veo difícil mantener la intensidad, el entusiasmo y la energía que hacen falta para estas tareas más de cuatro años. Sin embargo, después de haber hecho ya trece mudanzas, la política, tal y cómo la he vivido estos años, ha sido la actividad que más me ha llenado. -Si pudiera volver atrás, ¿qué cosas no volvería a hacer y cuáles sí? -No estoy demasiado arrepentido de lo que he hecho. En el debe se encuentran sin duda las directrices de ordenación del territorio y la puesta en marcha de una televisión autonómica. En Industria me hubiera gustado resolver, cómo no, el problema del paro. -¿Y en cuánto al aspecto personal? -Quizá mi inexperiencia en la política es lo que me hubiera gustado cambiar. -¿A qué actitudes se refiere? -En Castilla y León seguimos discutiendo cuánto más de ayudas europeas podemos recibir y por cuánto tiempo más, cuando esas ayudas tan sólo constituyen el 1% de la riqueza total europea. Donde está realmente el futuro es en el 99% restante, es decir en nuestros propios productos, en nuestro turismo, etc...