Un millar de personas suben al pico Urbión para colocar el nacimiento

Unas mil personas subieron ayer al nacimiento del río Duero, en la Sierra de Urbión (2.256 metros de altitud), para presenciar y participar en la instalación de un nacimiento junto a la Laguna Negra con el fin de celebrar el comienzo de la Navidad. Este acto ya tradicional, organizado por el Centro de Excursionista Soriano (CES), se celebra todos los años el domingo anterior a Nochebuena. Los excursionistas ascendieron, por decimoctavo año consecutivo, desde primeras horas de la mañana desde Duruelo de la Sierra, Covaleda y la Laguna Negra, los tres caminos más habituales, hasta los Picos de Urbión pasando por parajes de destacada belleza como Castroviejo, uno de los puntos más visitados en Soria por los turistas, para participar en una de las actividades más entrañables de la Navidad en la provincia debido a la belleza del entorno que como este año presentaba un denso manto de nieve. Brindis Los participantes accedieron a Urbión en motos de nieve, vehículos todo terrenos, realizando esquí de fondo e, incluso, en trineo tirado por perros al ritmo de sanjuaneras y entonando villancicos a pesar del esfuerzo que exige para los que suben andando la ascensión, que desde Duruelo de la Sierra se prolonga durante 15 kilómetros en medio de temperaturas mínimas. Una vez en los Picos de Urbión, miembros del CES escogieron el lugar de instalación del nacimiento entre brindis de cava y al ritmo de la música, convirtiendo la elección en un motivo de celebración que se prolongó durante el tiempo de colocación del Belén. Después de la instalación del nacimiento en uno de los parajes más representativos de la provincia debido a su belleza y por acoger el nacimiento del río Duero, continuó el ambiente festivo y de celebración con una degustación de dulces navideños y brindis a base de cava y moscatel acomodando la sierra en un improvisado espacio de celebración colectiva.