La Junta explicó en las Cortes el plan para reducir las demoras sanitarias, aprobado en diciembre
El Sacyl garantiza que la lista de espera quirúrgica será de cien días
Una novedad será la posibilidad de que los médicos de cabecera soliciten pruebas diagnósticas El 2
El Plan de reducción de listas de espera del Sacyl aprobado a finales del año pasado por la Junta de Castilla y León prevé que la lista de espera quirúrgica no supere los 100 días a finales del año 2007 -fecha tope de la planificación-, así como que la de consultas externas no sobrepase los 30 días y que la demora de pruebas diagnósticas sea inferior a los 20 días. Así lo destacó ayer en las Cortes el gerente de Salud de Castilla y León, Santiago de Cossío, quien compareció en la Comisión de Sanidad para explicar este plan a petición del grupo parlamentario popular. Durante su intervención, Cossío señaló que para conseguir estos objetivos el Sacyl ya ha cuantificado que tendrá que incrementar su actividad en 7.000 intervenciones quirúrgicas más durante el primer año de vigencia del plan (en 2003 se realizaron 154.630), así como 130.000 consultas externas más (3.555.226 en 2003) y alrededor de 13.000 técnicas diagnósticas más sobre las que se realizaron el año anterior. Aumentar el rendimiento Asimismo, entre las medidas que tendrán que ponerse en marcha para reducir las listas de espera, el gerente regional de Salud destacó la necesidad de lograr un mayor rendimiento matinal y aumentar la actividad en horario de tarde. Igualmente, señaló la necesidad de recurrir a programas de autoconcertación (es decir con profesionales y centros del Sacyl pero fuera del horario ordinario) y, «sólo cuando fuera necesario», a la concertación externa. Como gran novedad, Cossío destacó que los centros de atención primaria podrán solicitar pruebas diagnósticas como las tomografías axiales computerizadas (TAC), las mamografías, ecografías y las endoscopias digestivas, lo que no sólo serviría para agilizar el diagnóstico de los pacientes, sino que contribuiría a reducir las listas de espera ya que en muchos casos los enfermos llegaría a los especialistas «con el diagnóstico ya hecho». En este sentido, el responsable autonómico de Salud explicó que la posibilidad de que los médicos de familia soliciten estas pruebas estará sujeta a los protocolos que apruebe la Consejería de Sanidad. Por otro lado, Cossío incidió en las medidas en materia de información y control previstas en el plan de reducción de listas de espera, entre las que destacó la creación de un registro único y la comunicación a los interesados de los datos actualizados sobre la situación de cada una de las listas de espera. Por su parte, la procuradora socialista Teresa Rodrigo, que criticó la ausencia de un balance de los primeros cuatro meses de vida del plan, afirmó que la posibilidad de que los médicos de atención primaria puedan solicitar pruebas diagnóstica podría ser contraproducente e incluso crear nuevas listas de espera. Asimismo, Teresa Rodrigo denunció la falta de transparencia en la información sobre las listas y echó en falta más medidas estructurales capaces de corregir la saturación que actualmente sufre el sistema sanitario de Castilla y León.